Ya no se escuchará “¿Qué haces chiquilín?”… La muerte del “Groncho” enluta a “la Cuaró”

(Por Freddy Silva) La de ayer no fue una jornada más, la de ayer fue una jornada de luto para nuestra ciudad y nuevamente para Avda. Cuaró.
Parece que el destino se ha enseñado contra el Barrio Ciudad y nuevamente despertó con una ingrata novedad, cuando aún no estábamos repuestos del alejamiento del “Negro” Amaro.
Enrique Souza era su nombre, pero, ¿qué importa su nombre? ¡Todos lo conocimos como “Groncho”!
La política, el carnaval y el fútbol era su ambiente natural y seguramente allí quedarán sus mejores amigos y no le importaba el partido político porque aún en la vereda contraria supo trabajar por el carnaval riverense como reconocimiento a su trabajo sin importar sus ideales políticos.
En el fútbol, hablar de Frontera sin recordarlo es imposible y hoy, cuando físicamente no estará, lo queremos recordar con cada una de sus frases, de sus actos, pero en especial uno que nos tuvo como principal protagonista de su alegría y fue en la maravillosa e inolvidable tarde y noche del 8 de noviembre de 1998.
Esa tarde nos abrazamos festejando el ascenso directo de Frontera, por méritos propios y con una fiesta inolvidable en el Parque Viera, en el Prado montevideano.
El festejo que se extendió 500 kilómetros hasta llegar a la sede roja y volver a encontrarnos para mirarnos, y sin hablar, volvimos a festejar a nuestra manera.
Allí entendimos el sentimiento de un hincha y así quiero recordarlo, aunque hoy ya no haya quién nos diga “¿Qué haces chiquilín?”.

NOTA DE LA COMISIÓN DIRECTIVA DEL CLUB FRONTERA RIVERA CHICO

“Qué es la vida, sino un soplido como el viento, creamos amigos de una entrañable naturaleza, compartimos momentos increíbles, de grandes charlas, sonrisas, una copa de vino, un asado, tantos carnavales, compañero de Comisión Directiva, una pasión por el Rojo de la Cuaró inigualable, esa que la traía impregnada en la sangre que corría por sus venas, ese corazón que hoy se paró.
Se fue un grande, Enrique Souza, ‘Groncho’.
No estará para ver a su Rojo en lo más alto, pero acá sus amigos de alma, seguiremos batallando incansablemente para memorizarlo con grandes gestas.
Esas que nunca dejó de soñar, así como el Negro Amaro.
No es fácil escribir en un momento de tanta tristeza, te nos adelantaste querido amigo.
Pero tu recuerdo será eterno. Chau amigo y hasta pronto. Salud con ese vaso de vino”.
Comisión Directiva del Club Social y Deportivo Frontera Rivera Chico