Paysandú ganó en Artiga y nuevamente Paolo Patritti marcó un gol sobre la hora
ARTIGAS (Especial para NORTE). Fue un partido raro donde el local terminó con siete jugadores y un expulsado del banco de suplentes y aún así se terminaba empatado cuando apareció, cuando no, Paolo Patritti para anotar el único gol del encuentro.
Los sanduceros fueron superiores de principio a fin y pudieron haber liquidado el partido aún en el primer tiempo.
Al igual que en el partido jugado ante Rivera en el Parque Artigas, fue desperdiciando las oportunidades y luego termina casi entregando dos puntos porque aún jugando como visitante, el triunfo se imponía debido a lo que el partido ofrecía a su favor.
En definitiva, la blanca se llevó tres puntos de oro del estadio “Matías González” y mantiene una regularidad impresionante como visitante que no pudo confirmar como local.
Aun habiendo dejado por el camino dos puntos como local ante Rivera, pero pudo sumar de a tres fuera de casa, como sucedió en el debut ante Tacuarembó.
Superó algunos errores en la última línea, algunos desaciertos del arquero a la hora de rechazar, y pudo recuperar la pelota en mitad de cancha para encender el circuito futbolístico que tuvo en esta oportunidad varias piezas en el engranaje.
Frente a este rival, Artigas sufrió pese a que por varios minutos tuvo el dominio del balón.
Los locales tuvieron muy pocas posibilidades de anotar, apenas una muy clara, y la dejó pasar.
Paysandú tuvo las mayores chances de gol ante un rival que, con el paso de los minutos, iría perdiendo el rumbo y jugadores.
Es que fue sumando expulsiones, y las manos de Rotundo, que se repuso por alguna salida fallida en el primer tiempo, colaboraron en dos o tres ocasiones para mantener su valla en cero, con grandes atajadas.
Y Artigas se puso de mal humor en la cancha y ante un rival que apostó a hacerse fuerte esperando desgastar al rival en búsqueda de un contragolpe salvador. Ya con dos hombres de menos, el local hacía el intento por hacerse de la pelota, pero Paysandú le daba batalla, aunque le costaba a la Blanca poder hacer valer la superioridad numérica.
Pero, a pocos segundos del final, una subida de Chubrega terminó en un centro que Patritti transformó en gol, en tres puntos fundamentales.
En los instantes finales los locales siguieron perdiendo jugadores, terminaron con siete en la cancha y un expulsado en el banco de suplentes.