Mañana se conocerá el primer campeón de la temporada oficial

La categoría sub-15 llega al final del certamen con el enfrentamiento entre el campeón de la rueda clasificatoria, Huracán, y el campeón de la Liguilla, Nacional.
Decir que el partido es muy parejo es redundante porque los propios números así lo señalan, pero por encima de ellos está el momento de cada uno de los equipos.
Sin duda alguna que la rueda clasificatoria fue para el equipo más regular, el que a lo largo del certamen tuvo un nivel parejo de actuación y lo mereció sin duda alguna.
Huracán se afirmó en la punta y así transcurrió toda la rueda sin que en ningún momento hubiera dudas en cuanto a la posibilidad de lograr lo que finalmente conquistó.
Bajó en los primeros partidos de la Liguilla en el clásico y natural descenso que sufren los equipos cuando llegan a su máximo nivel.
Rápidamente recuperó su nivel y terminó la Liguilla de la misma manera que había terminado la primera fase.
Frente a si Nacional, con un equipo bien integrado, trabajado desde hace mucho tiempo por la misma dupla técnica que ha logrado satisfacciones interesantes para el club.
Con una carrera, dentro del torneo, que ha ido en ascenso de comienzo a fin, con una buena estructura de equipo y con jugadores muy experientes en la categoría.
No hay favoritos, ni uno ni otro puede considerarse ganador sin jugar porque el partido, y como consecuencia de ello, el título, puede llegar a definirse por situaciones puntuales que pueden ser determinantes del resultado final.
Lo concreto es que mañana a mediodía conoceremos al primer campeón del año y sea uno u otro seguramente se justificará por lo que han realizado no solamente este año sino porque, en definitiva, será la cosecha de muchos años de trabajo.