La Divisional B cerró actividades y el saldo es altamente positivo
El Consejo de la Divisional B cerró sus actividades del año con una cena de confraternidad que se realizó en el local de La Picaña detrás del Estadio Municipal.
Allí estuvieron presentes los dirigentes neutrales del Consejo, los de la propia Liga, algunos invitados especiales y los delegados de los clubes
Fue una amable reunión donde de-partieron anécdotas y gratos recuerdos de lo que se vivió en este primer año del retorno de la Divisional B al fútbol riverense.
Una de las principales conclusiones a la que arribamos al asistir a dicho encuentro de amigos fue saber que la casi totalidad de los clubes que permanecerán en la Divisional no solo ya han comenzado a pensar en el próximo año sino que además ya piensan en mejoras institucionales que les permita afrontar con mejores condiciones en el 2013.
Equipos que participaron en el reciente campeonato que ya han fijado fecha de reencuentro con sus jugadores para comenzar los entrenamientos para el año que viene, otros que procederán a inaugurar canchas para tener un lugar físico donde reunirse.
Pero además queda la certeza de saber que ya hay varios otros equipos interesados en participar en la próxima temporada, algunos de esos clubes no llegaron a tiempo este año pero saben que, con muchos meses de antelación comienzan a movilizarse y seguramente estarán en la cancha animando el certamen de la B.
Pero el destino siempre prepara revanchas y hasta situaciones insólitas porque con el voto de Edgar Raineri, hace catorce años atrás, se había liquidado la Divisional B y hoy, precisamente con su Presidencia, se vuelve a la actividad y con muy buenos resultados
Es el propio Presidente quien cuenta su experiencia.
“Fue un campeonato espectacular en cuanto a todos los aspectos, ya sean deportivos como económicos de los clubes pero creo que uno de los aspectos más importantes es la semilla que quedó para las próximas temporadas”
Edgar recuerda el momento que la Comisión Directiva le encargó la Presidencia de la Divisional B
“Justo yo que era el presidente de la B cuando ésta se disolvió, con mi voto se desintegró la Divisional porque quedaban solamente cuatro equipos y era ilógico jugar un campeonato en esas condiciones y había mucha tirantez con los clubes de la A y lo que se hizo fue juntar todos los equipos que pasaron a la Divisional A a jugar con doce equipos. Era muy difícil porque venían equipos nuevos, otros que hacia muchos años que no estaban, delegados muy jóvenes y otros que hacían sus primeras armas pero, a lo largo del campeonato fueron siguiendo las directivas que fuimos imponiendo en las reuniones y eso fue fundamental para que el campeonato se desarrollara con total normalidad”
Para el presidente fue muy importante que a lo largo de la actividad de este año no hubiera ninguna situación anormal, no hubo denuncias, nunca quedamos esperando la resolución del Tribunal de Penas y, aparte de haber logrado dejar una semilla para las próximas temporadas, quedó una serie de delegados nuevos que también serán de futuro
“Pero en definitiva era una verdadera Quijotada porque personalmente había estado en el cierre de la otra Divisional y ahora estaba en el recomienzo de ésta “
Pero Edgar Raineri señala que en todo momento tuvo el apoyo incondicional de toda la dirigencia de la Liga y destacó la presencia de Ariel Vettorello a su lado, en la Secretaria de la Divisional y la de Luis Mario Leites en la tesorería cumpliendo una excelente labor.
Pero agrega: “me había puesto una meta porque en esto de la dirigencia uno aprende en cada una de las experiencias que tiene, yo había sido Presidente de la Liga de Veteranos, mucho más complicado, con 24 equipos, muchos delegados y reuniones interminables y tétricas, y ahí aprendí a ser un poco dictatorial a pesar que la palabra es muy fea, y ya había dispuesto que en la Divisional B, teniendo en cuenta los problemas que iba a haber, iba a actuar de la misma manera pero no fue necesario en lo más mínimo, los delegados colaboraron y me siento muy feliz por ello”
El presidente de la Divisional B realizó un balance perfecto de la actividad teniendo en cuenta los objetivos trazados: “estoy en el fútbol desde los 18 años, he aprendido mucho y tuve un gran maestro que fue Bernardino Freitas, entré a Sarandí para trabajar en ciclismo y fue Cañonero quien me llevó al fútbol aunque anteriormente ya había tenido experiencia como delegado en Ferro Carril y hasta había integrado una Comisión Directiva de la Liga en la época del Dr. Guadalupe, pero en ningún momento, este año, perdí el sueño por situaciones generadas en el Consejo de la B porque te puedo asegurar que desde las primeras reuniones me di cuenta que todo iba a correr con total normalidad, el ambiente era propicio y todos trabajamos por el mismo objetivo”
El presidente ya tiene proyectos para el año que viene ante el convencimiento que todo es perfectible y que se puede mejorar.
Todos sabemos que faltó un poco de interés al final cuando los que jugaron la final del certamen ya habían ascendido y es por ello que se piensa en realizar pequeños torneos dentro del mismo campeonato, clasificatorios y que mantengan el interés de todos en todo momento y que la final realmente decida un ascenso.
Para ello Edgar sabe que las primeras reuniones de la Divisional B se estarán realizando apenas comience el año venidero con la finalidad de comentar con tiempo para que la fecha tope del 31 de julio no los limite en cuanto a la organización.
En ese clima se vivió también el cierre de las actividades con la convicción que en enero del próximo año se vuelven a reunir con la finalidad de comenzar a pensar en la temporada 2013 dependiendo el número de clubes y la posibilidad de lograr un campeonato mas atractivo.