Este año no se jugará la 25ª edición del Campeonato Internacional de Bochas
Debido a los problemas de pública notoriedad, los responsables de la organización del Campeonato Internacional de Bochas debieron suspender la edición del certamen de la presente temporada.
En esta oportunidad se iba a disputar la vigésimo quinta edición de un torneo que ya es tradicional y que ha ganado un espacio importante en el deporte bochófilo de estas latitudes.
Los Campeonatos Internacionales comenzaron en el año 1995, oportunidad en la cual se inauguró la cancha sintética del Deportivo Social Sarandí Universitario.
En esa oportunidad estuvo presente el campeón nacional del momento, el Carmelo Rowling Club, el campeón de Entre Ríos, club Nicolás Russo, el campeón de Río Grande del Sur, Unión de Cachoeira do Sul, y el locatario.
Ese torneo se realizó durante un fin de semana, en modalidades masculina y femenina. En masculino se jugó en la cancha de Sarandí Universitario y en femenino en el Club Casa del Empleado.
El campeón en esa primera oportunidad fue el Unión de Cachoeira do Sul. Sarandí Universitario llegó a la final, perdiendo 15 a 14 en la definición del torneo.
En muchas oportunidades los verdiblancos solicitaron la colaboración de grandes jugadores a nivel nacional para reforzar a su equipo porque, en realidad, es muy difícil enfrentar a tan dignos rivales con lo que se tiene en la frontera.
En esa ocasión, los verdiblancos tuvieron el refuerzo de Alfredo Barrios, múltiple campeón. Alfredo Barrios se inició, como bochófilo en Santa Lucía, pero era oriundo de Lavalleja.
Como bochador fue el mejor. Era extraordinario, fue el profesor de los brasileños. Jugó muchos años allá y enseñó mucho. Un tipo muy macanudo, muy abierto.
SIGUIENTES EDICIONES
Al año siguiente se hizo un campeonato con la participación de más equipos, eran 24 y el campeón fue el Unión de Yaguarí.
En 1997 fue en homenaje a los cincuenta años de Sarandí Universitario y vinieron equipos de altísimo nivel, quizás el mayor de todos los torneos organizados. Incluso se hizo una invitación personal a los Presidentes de las Federaciones, y los clubes que vinieron lo hicieron con los mejores jugadores que tenían.
Estuvieron en nuestro medio campeones y vicecampeones mundiales; desde Brasil vinieron los mejores y hubo un gran desfile de inauguración.
Vinieron jugadores de enorme jerarquía de Mato Grosso do Sul, Santa Catarina, Sao Paulo, de Río Grande de Sul, de Entre Ríos, Córdoba, Buenos Aires y de nuestro país de casi todos los departamentos y jugadores archiconocidos. Fue realmente sensacional.
A partir de ese año, las organizaciones buscaban homenajear a los clubes y fue así que se jugaron los denominados “Casa del Empleado”, “Sarandí Universitario” “Artigas”, “Sociedad Italiana”, luego a dirigentes “Mario Domínguez”, y jugadores internacionales que venían a acompañando a las delegaciones.
En estos 24 años el equipo que obtuvo mayor cantidad de campeonatos fue el Cruceiro de Faxinal do Sotorno. Incluso se llevaron el trofeo que había sido instituido para quienes lo lograran tres años consecutivos o cinco alternados. En definitiva, obtuvieron siete u ocho títulos.
DESTACADOS JUGADORES
En estos torneos organizados por Sarandí Universitario estuvieron, entre otros, los brasileños, “Alemao”, Clair y Pedruca, que integraron equipos seleccionados brasileños que jugaron campeonatos mundiales con éxito, “Risada”, “Amarelinho”, “Caco”, “El Teniente”, incluso un argentino que jugaba en un equipo paulista, Juliano “Gugú”.
Entre los uruguayos que estuvieron presentes, Alfredo Barrios, Marcelo Espósito, Fernando Depisón, Jorge Hornos, Bauveta, Nicolás Paolino, Fabián Porcal, Burgueño, Martínez y una larga lista de muy buenos bochófilos. De Argentina se destacan Zapata, que fue campeón mundial, David Guardia, Pocho, Damián Pais, Leonardo Goronet, entre otros.
El año pasado el campeón fue un equipo de Garibaldi y estaban muy entusiasmados en volver en esta temporada. En el plantel de ese equipo estaba “Faisca”, que había estado en Colonia en un campeonato Sudamericano y fue campeón.
En estos últimos días, Luis Alvez Mello, uno de los principales organizadores a nivel local había recibido decenas de llamadas telefónicas de interesados en concurrir y querían saber que actitud se iba a adoptar.
El propio dirigente nos dijo que “no se podía esperar más, porque los equipos que vienen tienen una organización interna que lleva varios meses para prepararse y hubo necesidad de adoptar una decisión definitiva”.
Lamentablemente se ha tenido que suspender en esta temporada debido a los inconvenientes que genera la pandemia de COVID-19.