Rivera, viernes 17 de mayo de 2024

Nuestra opinión: El “arrastre” nos perjudicó y nos eliminó del campeonato

Pasan las horas y extrañamos estar junto a los gurises celestes en cada uno de los entrenamientos.
A la memoria viene la alegría de cada uno de ellos cuando llegábamos a la práctica con la máquina fotográfica, las poses, los saludos, en fin, la felicidad propia de chicos de 15 o 16 años.
Extrañamos la seriedad en el trabajo de Marcos Ramos, los aportes de Marcio Camy, el oportunismo de Fabián Villalba y los apuntes disciplinarios de Wilmer de Mello más lo que aportaba como jugador ayudante, Emanuel Cal.
¿Y pensamos porqué con un equipo muy bueno hoy estamos afuera de la Copa?
Un equipo que terminó invicto y le ganó los dos partidos a quien va a jugar la final del Litoral.
A Tacuarembó le ganamos cuatro a cero, (y pudieron ser más) en el propio Raúl Goyenola y después uno a cero en nuestro estadio.
Los rojiblancos van a jugar la final ante Río Negro y nosotros lo miramos de afuera.
Entonces vemos que la injusticia del reglamento es la que nos deja afuera.
Es cierto que conocíamos perfectamente el reglamento y que nada se podía hacer.
Pero la realidad nos muestra que la que nos dejó afuera en la sub-17 fue la propia selección mayor que clasificó junto a la juvenil con Fray Bentos y debimos seguir sus pasos.
Lo que se llama arrastre que en definitiva se inventó para gastar menos porque de esta manera Rivera viajó con las dos selecciones al mismo destino.
Fray Bentos fue primera en su serie y la celeste también mientras que en la otra serie quedaron los dos segundones, Tacuarembó y Bella Unión.
Nadie puede sentirse perdedor por no estar en la final, nadie puede molestarse porque la celeste no sigue en el certamen.
Hoy es momento de buscar los aspectos positivos, y los hay.
Se formó un gran grupo, se mostraron jugadores muy importantes para un futuro cercano, se trabajó durísimo y no hay, absolutamente nada a criticar.
El técnico, los ayudantes, los colaboradores y los jugadores se van del campeonato se retiran con la cabeza levantada, mirando a los ojos de quienes pretendan criticarlos.
Pero Rivera se va del torneo invicto.
No perdimos y miramos de afuera.
¡Qué increíble!

Deja un comentario