Rivera, jueves 28 de noviembre de 2024

Una artista de vocación, una mujer con historia

(Por Rosa Dutra) Suzana Ratto, una artista en el área musical, una concertista de piano, dialogó con NORTE y nos contó su historia, sus comienzos en el mundo del arte, sus planes futuros.
Una mujer sencilla, simpática e inquieta, fue la que visitó nuestra redacción y nos contagió con su entusiasmo, con sus deseos de vivir y su sueño latente por la música.
Es oriunda de Livramento y nació un 11 de enero. Comenzó a tocar el piano a los cinco años y se recibió a los 13 en el Conservatorio Musical Colleger. A los 15 años ya trabajaba como Profesora, y lo hizo por tres años.
Luego vino un receso, pues luego de un noviazgo se casó, pasando a residir en el campo, durante 31 años de su vida.
Allí nacieron sus seis hijos y poco tiempo le sobraba para practicar su profesión. En el campo conoció las dificultades. Carecía de luz eléctrica, planchada con carbón, lavaba, cocinaba, cargaba agua, cuando ésta escaseaba.
Le tocó vivir una tragedia: la muerte de su hija que falleció asesinada. Se separó de su esposo. Así se refugió en uno de sus amores: la música, que la siente con el alma.
Siempre recuerda y aplica la definición del gran músico que fue Beethoven: “la música es el único incorpóreo, con acceso a camadas más elevadas del espíritu”, quien vive la música, vive en otra dimensión, no en esta tierra que está plagada de tragedia.
Cuando ya flotaba en otra dimensión, surgió esa tragedia de su hija. Pasado un año, recuperó otra vez sus fuerzas y se envolvió en el arte que le elevó su espíritu.
Expresó que “Dios cuando nacemos nos da dos fuerzas: el poder y el talento. El poder, es para elegir entre lo que deseamos de la vida y direccionarla. El talento, es para desarrollarlo y compartirlo con los demás”.
Cree firmemente en su talento, además muchos lo reconocieron como la Profesora Betina Rivero, quien la alentó y le dijo que tenía condiciones.
Viajó muchas veces a Montevideo para perfeccionarse y desde ese entonces comenzó a brindar conciertos en 1992 y 1993.
Realizó cursos de Música en Brasil: Londrina (Paraná); Brasilia, Porto Alegre- Tomó clases con Raquel Boldorini, quien la elogió por su interpretación “San Francisco sobre las Olas”, una obra muy difícil y fantástica, lo que la dejó una gran satisfacción por los elogios recibidos.
Luego de un período de rosas, tuvo un impase por la enfermedad de su mamá. Fueron cuatro años de intensos cuidados, pero también fue invitada para ofrecer un concierto en Centro América: Guatemala y Honduras en el año 2000, siguiendo en Porto Alegre, Río Grande del Norte, Argentina. Livramento y Rivera.
Pasó un tiempo y vino la racha. Debido a un accidente doméstico al caerse de la escalera, se quebró en cinco partes el hombro. Continuó luchando para no anular el amor al arte. Sobrevino un crisis de pánico. Pasó dos años con el brazo dislocado. Fue operada en Porto Alegre, pero sin buenos resultados.
Consultó tras ello con varios médicos, los que le dijeron debía recurrir a una prótesis y eso la atemorizó, pues pensaba que no daría buen resultado, ya que el tiempo le había atrofiado los músculos, pero no se dio por vencida.
Viajó a Francia, consultó con un gran especialista y allí se colocó la prótesis. Realizo posteriormente una fisioterapia dolorosa y lenta, pero se recuperó.
Pasado cuatro años, volvió a practicar al piano, y en ello puso toda su dedicación, su ánimo y su voluntad. Su espíritu fuerte, venció.
Ahora, nos dice, está feliz, conquistó sus objetivos. Recientemente actuó en la Sala Rodó del Ateneo en Montevideo, ejecutando temas en un piano, en el que grandes celebridades ejecutaron.
Su concierto, fue prestigiado por una personalidad como Omar Naranjo y otro crítico del arte que escribe en la revista “Sinfonía”, que en la próxima edición, publicará una nota sobre la actuación de Suzana.
Recibió felicitaciones de una compositora uruguaya quien le dijo que hacía cuestión que ella interpretara una obra suya.
Omar Naranjo la elogió en la ejecución del tema de Gabriel Forré un romántico francés, y tocarlo solo quien es especial y posee cultura musical.
Esto para mí es estar bañada en agua de rosas”, manifestó. “Es un masaje para el alma, después de tanta lucha y esfuerzo”.
Fue invitada para actuar en el exterior y nuevamente en mayor de 2010 en el Ateneo.
A esa gran mujer, y excelente artista que tanto luchó para llegar a la cúspide, lleguen desde estas páginas nuestras felicitaciones y deseos que continúe transitando por la ruta de los éxitos y del arte.

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