Un riverense en la selección celeste mayor de básquetbol en sillas de ruedas
El deporte tiene de estas cosas, a veces los triunfos, a veces las derrotas pero siempre una sorpresa y en esta oportunidad la presencia de un riverense en la selección uruguaya de básquetbol en sillas de ruedas.
César Martín Pechetto sufrió hace un par de años el dolor no solo de un disparo de arma de fuego en su columna, sino la imposibilidad de locomoverse por sus propios medios.
Se enclaustró, vivía encerrado y no deseaba salir de su casa hasta que un día lo invitaron a integrarse al equipo de la ASANDEFD, en Livramento.
Se trata de un equipo de básquetbol destinado pura y exclusivamente a personas en sillas de ruedas.
Fue sin mucha ilusión porque nunca había lanzado la pelota a un aro y cuando se dio cuenta que no era difícil comenzó a practicar con asiduidad.
Un día se enteró de la selección uruguaya y a través de amigos consiguió la posibilidad de ir a entrenar en el Prado, en el equipo de APRI que es la base de la celeste mayor.
Obviamente el primer día no acertó una, estaba nervioso, había manejado toda la noche para estar en Montevideo bien temprano y no acertaba una.
La benevolencia del técnico que le dio otra oportunidad fue suficiente como para aferrarse a ella y desde el día siguiente pasó a tener un protagonismo especial.
Hoy ya conoce a todo el plantel, lo conocen a él y el técnico confía en su labor.
Sabe que aún le falta mucho, tiene que seguir luchando por permanecer en el grupo porque hasta ahora nadie le ha dicho que irá a los Panamericanos de Chile y mucho menos, si clasifica entre los tres primeros, a los Juegos Paraolímpicos de Toronto en Canadá.
A fines de enero se va a un período especial de entrenamientos y a un viaje al interior de Argentina donde los seleccionados celestes tendrán la gran oportunidad.
Pero, como suele suceder en estos casos, hay un serio inconveniente y está referido a la necesidad de contar con una silla de ruedas adecuada al deporte.
Tiene la colaboración de la Intendencia y de amigos particulares, como asimismo de su propia familia pero, para ello necesitamos el aporte de todos los deportistas riverenses. Más información en la edición impresa.