El Deportivo Colina festejó su vigésimo tercer aniversario
El pasado 7 de enero el equipo del Deportivo Colina festejó sus 23 años de vida. Lo hizo con una gran fiesta en su hábitat natural, la zona del Armour de Livramento.
Hasta allí fuimos con la idea de seguir viendo a un equipo diferente, una institución que demuestra que en muchas oportunidades el dinero no lo es todo, que pueden suplirlo con trabajo, con esfuerzo y con unión.
Ya lo habíamos vivido cuando el Deportivo colina salió al ruedo del interior a representar al fútbol de Rivera en la última Copa Nacional de Clubes de la Organización del Fútbol del Interior (OFI).
Todos suponían que era un viaje de retorno rápido y negativo en cuanto a resultados deportivos pero se sobrepusieron a la adversidad y no solo llegaron al primer lugar en la Serie donde estaba el poderoso Estudiantes de Tacuarembó con gran estructura, con dinero y excelentes jugadores, sino que se llegó a la Divisional A del fútbol de la OFI.
Y entonces llega lo lamentable, lo que nunca pudieron superar, que fue la eliminación del certamen en la ejecución de remates libres desde el punto penal, cuando todo estaba para que se ganara la serie ante el Pirata Juniors de Artigas.
HISTORIA
Pero la historia del “azulón” comienza un par de años antes de aquel 7 de enero del ‘94 cuando Miguelito Lemes era militar en Montevideo y llega un fin de semana a nuestra ciudad.
Precisamente ese fin de semana, un grupo de jugadores amigos habían organizado un partido y lo invitan para dirigir al equipo.
Entre otros estaban Marcos Cross, César Navarro, Fabio Cuña, Fernando da Cruz.
Miguelito aceptó y ya no volvió más a Montevideo, se quedó y comenzaron a organizar un equipo de gurises que comenzó a jugar partidos y campeonatos.
Al día siguiente a aquel partido que podría ser considerado el primero de este equipo, ya se había conformado todo y los padres del “Alemão” ya compraron los equipos y estaba todo dispuesto para el pago de inscripciones y costos de participación en los campeonatos.
Y el equipo comenzó a ganar partidos y campeonatos y todos por goleadas, era difícil que se ganara con resultado ajustado hasta que un día se resolvió pasar a fútbol once.
Pasaron a integrarse a un equipo llamado Cantarera pero no era lo mismo, el equipo perdía y perdía y no había entusiasmo alguno por seguir en ese rumbo.
En la casa de “Los Lemos” se llevó a cabo la reunión que podría considerarse la primera del Deportivo Colina.
“Todos los Lemos están en el barrio y los que nos apoyaron desde el comienzo también, estamos a dos cuadras, como máximo, unos de otros y por eso fue muy fácil unirnos y lanzar la primera piedra de un equipo de fútbol”.
Como en toda familia hay problemas pero cuando se habla del Colina todo se olvida y todos van juntos hacia el mismo lado con el mismo objetivo.
El primer campeonato que se participa fue uno organizado por Gremio con el nombre de su patrono “Luis Paulo Garagorry Dutra” y el Colina lo pierde en la final precisamente ante el Gremio que había conformado una verdadera selección de jugadores de Livramento y hasta alguno traído de Rivera.
En ese equipo del Colina vinieron a jugar, entre otros Petter Rocha y Walter Fernando Ibáñez.
Fue entonces que el Colina se inscribe en los Campeonatos de fútbol Amateur de Livramento donde hoy dice, con mucho orgullo, que es el penta campeón.
Pero un día se terminaron los campeonatos de la Liga Amateur y había necesidad de seguir adelante con el Deportivo Colina, apareció Wilmar Carafini que comenzó a apoyar al equipo y se resolvió comenzar las tratativas para inscribirse en la Liga de Fútbol de Rivera.
Comienza entonces una nueva historia, la que es más conocida, la que nos demuestra a un equipo participando en el certamen de la Divisional B de nuestro fútbol, logrando el título de campeón y al año siguiente llegando a una final del Campeonato Rivera de Primera División y perdiéndola en un alargue.
Fue así que el Deportivo Colina adquirió, por derecho propio, llegar a la Copa Nacional de Clubes de la Organización del Fútbol del Interior.
El resto es más que conocido, se ascendió a la Divisional A, es uno de los ocho mejores equipos del interior uruguayo y este año aspira a una muy buena participación.
Sus principales señalan que la eliminación de la Copa a manos del Pirata Juniors por penales cuando aún en medio de la serie estaba todo servido como para ganarla, dejó secuelas que fueron muy difíciles de cerrar, incluso saben muy bien que una de ellas fue la muy mala actuación en el Campeonato Rivera de la temporada pasada.
Hoy todo es diferente, el equipo sigue buscando fuerzas en aspectos que no tienen que ver con el dinero en forma directa y es por ello que la Familia Colina está muy contenta porque su principal hincha, Priscila, que es la Secretaria de la institución, dio a luz a una hermosa niña precisamente el 7 de enero de hace dos años.
Y esa es la fuente de energía que tienen ahora para enfrentar un nuevo año.
Su Presidente nos ha confiado que la idea es participar con un equipo competitivo, uno que tenga posibilidades de muy buenos resultados.
Wilmar Carafini señaló “A nosotros nos gusta el fútbol, mucho más visto desde este punto de vista, con una familia atrás que le da el sostén que necesitan todos pero si a ello le agregamos algunas victorias, mucho mejor porque son las que reúnen mucho más a los deportistas”.
Agregó: “Vamos a seguir trabajando para seguir recogiendo frutos como hasta ahora y en ese sentido vamos a encarar una doble competencia, en la Copa de Clubes, Divisional A y en el Campeonato de la Liga de Rivera que es muy caro pero que felizmente no debemos absolutamente nada. Para ello, en principio lanzamos una rifa de una moto 125cc y los fondos los vamos a guardar para eso”.
Con relación al equipo que pretenden para este año 2017 señaló: “vamos a participar con un buen equipo, que sea altamente competitivo, lo vamos a reforzar para hacerlo mucho más fuerte de lo que ya fue el año pasado”.
Finalmente el Presidente de la institución, el día de sus 23 años de vida, nos dijo de su satisfacción por haber sido invitado a participar de este emprendimiento convencido que se trata de una gran familia que ha sido denominada la Familia Colina, compuesta por gente humilde, trabajadora, simple que les encanta el deporte y el fútbol y que a la hora de trabajar no se fijan en edades, sexo o cualquier otra diferencia, mujeres y hombres, de cualquier edad y condición económica, tiran al mismo lado y logran objetivos que podrían parecer imposibles”.
Este es el Deportivo Colina, que el pasado 7 de enero, en su barrio, en la cancha del Armour, festejó sus 23 años de vida.