El deporte en mini noticias
– Mucho se ha comentado en relación a los partidos amistosos que ha jugado la celeste en estos últimos días.
– Recibimos varias llamadas telefónicas una vez que estuvimos presentes en Santa Isabel presenciando los dos encuentros y especialmente referidos a lo que pasó en el minuto 89, a uno del final y cuando el árbitro debió haber finalizado antes que se generaran los disturbios.
– Son partidos que, lamentablemente, no son encarados como lo que en realidad lo son, amistosos para que los técnicos puedan extraer conclusiones y buscar mejoras.
– Lejos de ello, la pierna va fuerte demás y nadie quiere perder sin importar que no hay nada en juego.
– También, debemos convenir, que no es un partido fácil de arbitrar, los jugadores saben, de antemano, que no hay expulsión, que la amarilla poco o nada importa y que, en el peor de los casos se va al banco.
– El partido en el Omar Odriozola tuvo mucho de eso, el árbitro permitió que se jugara fuerte, que se conversara mucho en la cancha y hasta hubo un hecho que fue determinante de lo que pasó al final y que no puede pasar inadvertido.
– Sucedió al término del primer tiempo cuando los celestes ya no estaban en la cancha y los isabelinos le reclamaron airadamente al árbitro.
– Claudio Salmentón reaccionó y se vio envuelto en una correría que lo llevó a encerrarse en el vestuario hasta que se calmaran los ánimos.
– Todos volvieron a la cancha, incluso aquellos que habían protagonizado el lío y nada pasó.
– Pero que quede claro, en el minuto 89, cuando un zaguero agredió a Marcos Ramos y éste reaccionó, hubo muchos que llegaron hasta el lugar, que intentaron separar y otros que también aprovecharon para algún golpe a un rival, pero la mayoría, como sucede en estos casos, intentaron separar.
– Los jugadores de Rivera se fueron al vestuario en medio de insultos y amenazas no de los jugadores rivales sino de algunos energúmenos que estaban en la tribuna, pocos pero estúpidos que aprovecharon el alambrado para hacerse los valientes.
– Lo que pasó después no tuvo a los celestes como protagonistas, ya no estaban en la cancha y los isabelinos la volvieron a emprender contra el árbitro.
– El lesionado, del que tanto se habla en filas del equipo de Paso de los Toros, se lesionó no durante el partido ni durante la reyerta, sino que fue al caerse en el vestuario corriendo tras el árbitro, y que quede muy claro.
– Por lo demás, no pasa de lo que normalmente pasa en un partido amistoso y al decir del Presidente de la Liga isabelina al responder a un reportaje que le realizamos: – “¿Y usted todavía quiere volver al Noreste?”.