El pasado domingo 28 en el Colegio Juana de Ibarbourou de barrio Rivera Chico, la comunidad de ese populoso barrio, junto con los representantes de la Parroquia Santo Domingo de Guzmán, inauguraron uno de sus salones con el nombre del ex-sacerdote alma máter de la Parroquia y del Colegio, Walter Silva Godoy.
Para conocer más detalles de lo que fue esa jornada, NORTE dialogó con el Presidente de la Comunidad, Edgardo de los Santos, quien nos dijo que “el nombre bien merecido fue a la persona que con su esfuerzo y voluntad fundó la Parroquia y colocó los primeros cimientos para la construcción del Colegio en la década del ‘50. Fue el que convocó a todos los vecinos para que se unieran a este gran proyecto, porque Rivera Chico debía tener un espacio educativo”.
La idea de que un Salón llevara su nombre data desde la época en que el Padre Edgar Arambillete estuvo como Párroco de Santo Domingo, porque deseaban homenajear en vida al Padre Silva como todos lo conocen, y ahora con el Padre René es cuando finalmente se plasmó la idea.
En esta emotiva ceremonia muchos de los residentes del barrio se hicieron presentes, entre ellos gente que estuvo desde el inicio del Colegio, como Teresita González Severo, la señora de Don Severo González, uno de los constructores del Colegio, quien hizo la obra en forma gratuita.
“La gratitud es lo que marca el perfil del barrio, el perfil de la Comunidad”, señaló Edgardo de los Santos. Inclusive el Arquitecto Polaco, fue quien hizo los planos del colegio en forma honoraria, aunque él no gozaba de una situación económica buena. “El terreno donde fue construido el Colegio hubo que limpiarlo; allí existía mucha basura, muchos árboles frutales y el Padre Silva se ‘remangó’ y comenzó a trabajar duro”. Fueron construidos los treinta y seis patines que eran los cimientos o las columnas de sostén del edificio. “Según el propio Padre Silva de treinta y seis patines, treinta y cuatro los levantó él”.
Entre otros presentes, estuvieron en el acto José Biurra, la hermana de Fredy Silva, Eloir, Eloísa, Ramón Maydana Director del Colegio Juan Pablo Segundo, Mireya Ribas Directora del Centro de Capacitación Juana de Ibarbourou, entre muchos más. Actualmente el Padre Silva, cuenta con 86 años y está muy lúcido.
Lo destacable del acto fue cuando se leyó una poesía de la escritora María Elcira Berrutti, alusiva a cuando el Colegio cumplió siete años. En ella se personifica al Colegio ya que dice: “yo soy un niño de siete años y tú Tata que siempre estás conmigo, te cuento que hoy ya tengo mi pared levantada de los salones, al cual las mamás (las hermanas) me cuidan mucho”.
Fue la parte más emotiva ya que todos recordaron los comienzos y a más de uno se le escapó alguna lágrima, como a Edgardo, que fue alumno del Colegio y hoy su hija Agustina lo es también.
Este acto tan sencillo como lo es el Padre Silva, quedará en el recuerdo de todos y del barrio para una persona que transformó la zona de Rivera Chico y fue un pionero en su época. Al finalizar dicho acto se hizo una celebración en la Misa, donde se participó con mucho entusiasmo.
OTRAS ACTIVIDADES DE
LA COMUNIDAD CUARÓ
Aprovechamos para preguntarle a Edgardo de los Santos sobre futuras actividades de la Comunidad Cuaró, una ONG. Nos dijo que se están preparando para los días 3 y 4 de setiembre, para la Jornada Diocesana de la Juventud, Encuentro de Jóvenes Católicos de la Pastoral Juvenil, cuando se reunirán en la Plaza 18 de Julio.
El pasado sábado, celebraron la Fiesta del Adulto Mayor con elección de su Reina, en el Salón Parroquial. “Aunque llovió mucho la fiesta fue un éxito, con participación de un público interesante. Fueron cuatro las candidatas que se presentaron para disputar el título, y lo obtuvo la Sra. Sonia de Bottino”.
Agradeció la colaboración de dos integrantes de la Comisión “que son incansables y resultan un orgullo para el Barrio: las Maestras Sara Ibarra y Marina Elías Daher, quienes son dos grandes baluartes y no es cualquier Barrio que tiene gente como ellas”, finalizó.
