Transcribimos palabras del Edil Ramón Román Taroco, en oportunidad de hacer uso de la palabra en la media hora previa de la última sesión de la Junta Departamental de Rivera:
“Señor Presidente, señores Ediles, el jueves próximo pasado otra vez Rivera fue titular en todos los noticieros y tapa de diarios de todo el país.
Esta vez el promotor de la noticia fue el Poder judicial, dado la sentencia de procesamiento de 12 funcionarios policiales y de un ex-policía por parte del Sr. Juez Letrado de Segundo turno.
Como lo venimos diciendo en los últimos tiempos, no desacatamos las sentencias dictada por los magistrados, pero no compartimos los criterios aplicados para algunos procesamientos como por ejemplo, el del Agente Ángel Fernández y ahora el de los 12 policías y de un ex policía.
Que no se vaya a pensar que no queremos que se aclare la muerte del recluso Castaño.
Creemos que es una obligación aclarar este hecho, como también creemos que hay que darle la garantía de defensa al Agente Ángel Fernández por el motivo que en primer instancia fue defendido por una Abogada que no tenía título, y esto no fue considerado por la justicia que lo procesa lisa y llanamente.
Yo no tengo formación jurídica, pero en los cursos de pasaje de grado que realice en la Escuela Departamental de Policía donde una de las materias que dictaban era Derecho penal; entre otras cosas nos enseñaron, que para que exista un encubridor debe de haber un autor material o intelectual.
Y esto es el primer cuestionamiento que hacemos ante el procesamiento dictado el día jueves en horas de la noche.
Segundo cuestionamiento: Entre los 13 funcionarios hay un perito de policía técnica que fue destinado para fotografiar el boquete por donde supuestamente iba a salir él o los reclusos, que nos consta salió el recluso Castaño.
Este policía no usó para nada su arma de reglamento, el arma que poseía era la máquina fotográfica.
Lo mismo pasa con un Agente que sostenía con sus manos a un perro, que estaba esperando ordenes de ataque si fuera necesario, tampoco uso su arma de reglamento.
Tercer cuestionamiento: Aparentemente el proyectil extraído del cuerpo del occiso no fue disparado por ninguna de las armas que portaban los policías afectados a este operativo; también nos consta que el Coordinador Enrique Guedes estaba desarmado.
Cuarto cuestionamiento: Después de este hecho, en el mes de mayo del año pasado, se realizó un intento de fuga en la cárcel, que justamente el Agente Ferrón, hoy procesado por encubrimiento, fue gravemente herido en la cabeza, sufriendo actualmente serias secuelas. Tampoco se tuve en cuenta que este policía casi pierde la vida para evitar una fuga masiva.
En este intento de fuga se incautaron dos revólveres, que muy bien uno de ellos, podría haber sido utilizado para herir al hoy occiso Castaño, pero según información a estas armas no se realizo la pericia de balística.
Sr. Presidente, señores Ediles, a vuelo de pájaro podemos ver que hay muchos flancos débiles para que los defensores utilicen en los descargos que tengan que realizar, pero esto no es un consuelo para aquellos guardianes del orden que trataron de hacer todo lo posible para que el procedimiento se realizara con éxito y realmente se detectara al o los autores del boquete.
Creemos que el Sr. Magistrado actuante se apresuro, debería de seguir investigando, y si fuera necesario exigir a las autoridades del Ministerio del interior que proporcionaran peritos de otro país para analizar las armas en cuestión.
Yo recuerdo una frase que un día me dijo un Viejo Juez de Paz, hoy desaparecido, Álvaro Madruga: ‘Para procesar siempre hay tiempo, pero no hay tiempo que repare una injusticia’.
Hoy Sr. Presidente y señores Ediles, tenemos el personal equivalente a la fuerza efectiva de una Comisaría de campaña procesado.
Tenemos a madres, esposas e hijos sufriendo por el procesamiento de humildes funcionarios policiales, que prestes a defender a la sociedad que tanto reclama por seguridad, hoy son víctima de un proceso; a nuestro entender, abarrotado de lagunas jurídicas”, concluyó.