Todo lo que se diga en relación al partido de juveniles, antes de los 43 minutos del segundo tiempo estará inexorablemente ligado a la pésima actuación arbitral.
Pero además futbolísticamente se rescata algunos buenos minutos de la selección celeste que de todas maneras no tuvo continuidad en su mejor juego.
Los celestes comenzaron a todo ritmo, arrollador, avasallador y el gol no demoró siendo una lógica consecuencia de lo que se veía en la cancha.
Uno a cero, conformismo, inoperancia del rival y los nuestros que se “acomodaron” en la cancha dejando pasar los minutos para festejar el triunfo.
Pero ya desde los primeros minutos del partido se advertía una clara disposición a la equivocación que tenía el árbitro floridense.
Pasó, cada vez más, a ser el protagonista de un partido que por momentos fue anodino.
Y, cada vez más, se fue alejando de la jugada, siempre lejos, a veces muy lejos y comenzaron los errores que perjudicaron a unos y otros.
Ya al finalizar el primer tiempo el floridense era el personaje del partido. Estaba perdido, tardó en volver a la cancha y completamente alejado de la realidad del partido.
Pero llegamos a los momentos claves del partido, la expulsión de Wallace, la presión que ejerció sobre el árbitro y la balanza que se había inclinado a favor del local, se dio vuelta y sanciona, a los 43 minutos, un penal inexistente a favor de la celeste.
Ese fue apenas el primero e una serie de errores impresionantes.
Primero, si considera que fue penal, porque lo sancionó, se olvidó de expulsar al golero local que fue el que cometió la pena.
Segundo omitió la expulsión a un jugador rojiblanco que se lo llevó por delante y estuvo a punto de caer solucionándolo con una pálida tarjeta amarilla.
Tercero, se perdió totalmente cuando comenzaron los golpes de puño y las “patadas voladoras” en la cancha, se escondió tras la policía y lejos de poder determinar quienes participaron, lo que viene será una verdadera lotería.
En determinado momento mandó a un policía que avisara a los equipos que se fueran de la cancha porque suspendía el partido por riñas generalizadas.
Una hora después entrega la primera parte del formulario donde indica que Tacuarembó quedó con seis jugadores, expulsando a cinco y quedando en inferioridad numérica.
También expulsa a tres jugadores de Rivera que sumados al que fue expulsado en el partido, nos deja con siete jugadores en la cancha y, supuestamente, ganador del partido.
Ahora viene el segundo capítulo, el que se define en los Tribunales y recién allí se sabrá, quienes son los expulsados, qué establecerá el Tribunal y, lo principal, recién allí sabremos el resultado del partido aunque todo indica que los celestes ganaron.
LOS DETALLES
TACUAREMBÓ 0 RIVERA 1
Cancha: Estadio “Ing. Raúl S. Goyenola”. Hora de comienzo: 22:30. Jueces: Heber Viera, Giovanni González, Ricardo Suárez (Terna de Florida).
TACUAREMBÓ: Brandon Souza, Fabrino Pacher, Carlos González, Álvaro Lacroix, Gastón Martins, Sergio González, Iván López, Alexis Sima, Carlos Morales, Hugo Espino, Elías Romero.
Cambios: Cristian Larronda por Alexis Soma y Facundo Alonso por Fabrino Pacher
Observaciones: De acuerdo a lo que establece el formulario, a los 43’ de juego del segundo tiempo expulsó a cinco jugadores quedando en inferioridad numérica
RIVERA: Juan Carlos De León, Pablo Lemos, Marcelo Da Silva, Diego Tonna, Bruno da Silva, Marcelo López, Jonathan Fontoura, Leandro Ramírez, Bernardo de la Vega, Walter Vargas, Pitter del Pino.
Cambios: Mauro Fernando Britos por Pitter del Pino y Pablo Mora por Leandro Ramírez.
Goles: Marcelo López a los 5’ del primer tiempo.
Observaciones: A los 23’ del primer tiempo fue expulsado el jugador Bruno Renato da Silva. A los 43’ del segundo tiempo expulsó a tres jugadores, aún no identificados.
