Ya se habla de esa posibilidad, y por ahora no pasa de eso, pero es una gran posibilidad. Danubio ha dicho que si llega sin posibilidades de clasificar a la siguiente ronda de la Copa Libertadores, le sirve jugar en Rivera.
Estamos plenamente seguros que ese partido, con o sin chances del equipo capitalino, recaudará mucho más en nuestro estadio que en Montevideo, donde seguramente tendrá que ir a jugar a la cancha de Defensor o Nacional porque el Estadio Centenario le va a quedar muy grande.
Los empresarios que tuvieron la valentía de organizar este espectáculo vivido el pasado fin de semana, tendrán que entender que las condiciones son diferentes, que no podemos pensar, de ninguna manera en veinte mil personas, pero que bien vale la pena el esfuerzo y que la promoción habrá que hacerla en territorio brasileño buscando atraer a miles de paulistas y amantes del fútbol.
Sería muy interesante que São Paulo llegara con posibilidades de clasificar en ese encuentro, que necesitara los puntos para ello.
Habrá que pensarlo muy bien, habrá que definirlo con detalles mínimos pero de algo estamos plenamente seguros y es que lo que se vivió, tanto a favor, por suerte la mayoría, como en contra, que fue la minoría, sirve como una experiencia extremadamente positiva y hay que seguir impulsando, cada uno desde su lugar de trabajo, que estos espectáculos se reiteren en nuestro medio, en nuestro estadio para que deje de ser considerado un “elefante blanco”.
Ahora se vuelcan los esfuerzos para traer el partido Danubio-São Paulo
