El viernes en el Salón de Actos de la comuna UNI 3 Rivera realizó un Taller sobre la calidad de vida en la Tercera Edad, dictada por la Dra. Mirta Pereira de Araújo, a la cual concurrieron muchas personas y representantes de otras instituciones que trabajan con el Adulto Mayor.
En diálogo con NORTE nos dijo que se trataba de un tema muy importante, que hacía años tenía como un Proyecto de Vida, para promover la calidad de vida y lo hace en un grupo de Maestras y profesoras que colaboran con ese Proyecto.
Para mejor calidad en la Tercera Edad existen muchos factores entre los cuales destacó ser activo, no jubilarse y quedarse en su casa, tener proyectos, cambiar los estilos de vida que son comunes en Uruguay, realizar ejercicios, dormir bien, comer casi sin sal, alimentarse bien, sin que ocasionen enfermedades crónicas que resultan co discapacidad y pérdidas de función, haciéndolos dependientes.
Al ser activo, se desecha la soledad y problemas emocionales. Hay que aprender a compartir con otras personas, comunicarse con ellas, así se evita esa soledad. Hay que buscar incentivos, perder el mal humor.
“Lo primero que tiene que cambiar algo para que el adulto mayor de hoy y el del futuro, no sufra, es querer hacer las cosas, educarse, aprender aprendiendo y tratar de buscar un entorno favorable y digno. Debemos aprender siempre”, expresó.
“No crecemos por pinta, ni dinero, ni otros bienes materiales, ni porque nos quieran, crecemos cuando aprendemos cosas y podemos a su vez, educar y enseñar”, reiteró.
Es la forma de cambiar sobre el maltrato que sufren muchos adultos mayores, dijo, que son las carencias y límites que impone la sociedad, las discriminaciones de las que son víctimas.
El saludo ligero es un maltrato, pero lo peor es la discriminación de la cual son objeto, el maltrato físico también y muchas veces muchas veces comienza en la familia o con los cuidadores,
En Uruguay existe una ley que es a favor del anciano, esa ley se creó en el año 2004, pero se comenzó a trabajar desde 1999, y es la ley 17796, aunque en ella hay mucha teoría.
Hoy existen muchas personas trabajando para ayudar a esa gente de edad, pero son esfuerzos aislados y no hay una red de trabajo.
Finalizó diciendo que a pesar de haber muchas instituciones que nuclean a la Tercer Edad, “cada persona envejece como vive”, pero la situación hay que revertirla.
