Los amarillos eléctricos

Los amarillos eléctricosEn unos días veremos por las calles de Rivera unos automóviles amarillos de forma extraña, totalmente silenciosos, transitando por lugares históricos, por la zona comercial y aquellos puntos considerados de atracción turística. Se trata de automóviles eléctricos, traídos a Rivera por el Sr. Robert Benavides, representante de la empresa Mastirel S.A. que se instala en Rivera.
Benavides dijo a periodistas de NORTE que la empresa procura brindar servicios, en una primera etapa servicios de transporte a turistas: “Se trata de una rentadora de vehículos ‘Electric rent a car’. Tenemos cinco vehículos, importados de China, un cuatro por cuatro 500 cm³, todo terreno, también importado de China y un cuatriciclo 250 cm³. Estos funcionan con combustible, están pensados para el turismo agreste; Valle del Lunarejo y todos aquellos lugares en los que los autos eléctricos no puedan llegar por su potencia y su altura del piso”.
Pero lo que llamaba la atención a peatones, incluso a automovilistas, que pasaban frente a la Intendencia, eran los autos amarillos, principalmente uno de ellos: visto de frente, recuerda ciertas líneas de los primerísimos Ford A. Muy bien lograda la simulación de un motor con una careta que nos traslada a aquellos radiadores oscuros. Pero es una impresión pasajera, un dejo de nostalgia virtud de este diseño moderno. Al levantar la vista volvemos, ver el parabrisas, nos hace pensar en aquellos parabrisas que se “abrían” de abajo.
Pero todo esto dura segundos, al menos así sucedió con los curiosos que preguntaban y preguntaban, despertaba la curiosidad el combustible, la forma que se acciona el motor eléctrico, ¿cómo recibe la electricidad? ¿Qué velocidad desarrollan? ¿Dónde está la batería? Y por supuesto no faltó el despistado que preguntó, ¿dónde tiene el carburador?
Robert Benavides contó a NORTE: “Son autos para la ciudad propiamente dicho, este, el que usted está viendo (el que me recordó al Ford A) es un modelo clásico con ocho asientos, propio para pequeños tours. Tiene una autonomía de ocho horas, una velocidad máxima de 40 Km/hora, tiene un tiempo de carga que demora entre 10 y 12 horas. Es decir lo dejamos cargando toda la noche y al otro día está pronto. Se puede cargar en cualquier enchufe”.
“Este modelo clásico, luego de realizar un estudio se demostró que se le puede incorporar un panel solar al techo de forma tal que tendrá autonomía propia, la batería se carga con un acumulador entre el panel solar y la batería”, concluyó.

Diario NORTE: