Clubes de Servicio, centros docentes, autoridades, han estado presentes siempre, desde su creación, no sólo en la faz pecuniaria, sino también en la espiritual, llevando alegría a los allí internados.
Han pasado también muchos años, pero el Hogar de Ancianos, de la Obra Filantrópica Santa Fe, Esther Pombo González, ha mantenido el motivo por el que fue creado y se ha refortalecido con la adhesión de las familias de la frontera, que lo han elegido entre todas las existentes en el entorno, para que sus familiares tengan allí, lo que por sus propias actividades laborales les impiden ofrecerles desde su domicilio.
Allí encontraron el cariño que dedican a los internados, el cuidado que les es dispensado, en todo momento. Al extremo que hasta varias bodas se han celebrado allí entre parejas de internados.
Es reconfortante destacar el hecho, que además de lo que ofrece a los internados, lo entregan también en tranquilidad de sus familiares, que en ellos han depositado. Fotografía: Edilberto Chalela.