Viceministro Daniel Garín aseguró que el país padece déficit hídrico y no sequía

El subsecretario del MGAP informó que a pesar del déficit hídrico que afecta el crecimiento vegetal en varios departamentos, no existe una situación de sequía agropecuaria. Agregó que se insta a los productores a prepararse ante futuras sequías y que para ello se destinan US$ 40 millones para infraestructura de riego en el período 2010-2015. Desde 2005 se realizaron más de 4.000 obras en pequeños establecimientos y se acordaron más de 2.000 obras para 2012.
Garín indicó que el déficit hídrico implica la reducción gradual del almacenamiento de agua en el suelo que imposibilita el normal crecimiento vegetal, como consecuencia de las altas temperaturas y el crecimiento vegetal que extrae agua del suelo, secándolo paulatinamente.
Por otra parte, el jerarca explicó que la sequía agropecuaria se da cuando una región geográfica importante registra ausencia de precipitaciones durante un muy largo tiempo, provocando el deterioro masivo de vegetales y mortandad de animales, esencialmente vacunos. “Cuando hablamos de déficit hídrico, hablamos de plantas que tienen dificultades para el crecimiento porque el suelo no tiene agua suficiente para que crezcan con todo su potencial, pero están creciendo activamente a una menor tasa de crecimiento”, aseguró Daniel Garín.
Hasta el momento el MGAP realiza un seguimiento del estado del suelo a través de los reportes que brinda INIA mediante el sistema INIA-GRAS que monitorea el estado de acumulación de agua en los diferentes suelos del país. Este estudio revela una situación actual de déficit hídrico en la mayoría de los departamentos del país que en algunas regiones es más intenso, con suelos que normalmente tienen acumulaciones de reserva de agua pero que hoy se encuentran por debajo del 15%.
El subsecretario del MGAP afirmó que en el transcurso de los años, el Gobierno incentivó mecanismos de monitoreo de las condiciones de evolución del déficit hídrico, en un trabajo conjunto del ministerio con la Dirección de Meteorología, el Sistema Nacional de Emergencia y el INIA que evalúan la situación durante todo el año.

LECHERÍA, GANADERÍA Y
HORTIFRUTICULTURA NO ESTÁN AFECTADAS

Asimismo, informó que hasta finales de la semana pasada no se registró afectación de la producción ganadera, lechera ni hortifrutícola. No obstante, en esos rubros existían preocupaciones concretas asociadas a la sequía en aguadas secundarias (reservas de agua de pequeño porte que son las primeras en secarse) pero que no significa que las unidades de producción se haya quedado sin agua.
En el caso de la agricultura extensiva, se registraron situaciones más adversas con pérdida de plantas en los cultivos de segunda y algunos de primera, lo cual significó una primera señal de afectación de la producción agrícola. “A nuestro juicio, todavía no amerita a considerar que pudiéramos estar ante una situación de afectación de la producción promedio de los cultivos de verano y deberíamos aguardar un poco más la evolución de cultivos para hacer pronósticos sobre la afectación de rendimiento”, expresó el subsecretario.

APOYO A PEQUEÑOS PRODUCTORES
PARA ADAPTARSE AL CAMBIO

El MGAP desde 2005 desarrolla políticas de inversión hacia obras que ayuden al sector agropecuario a montar infraestructuras que permitan mitigar estos efectos. Concretamente, se financian proyectos de alumbramiento y almacenamiento de agua, obras de suministro para el ganado que tenga una potencia suficiente para abastecer de agua ante una eventual situación de 70 días sin precipitaciones.
En ese sentido, Daniel Garín dijo que hay más de 4.000 obras ya hechas en todo el país, en los últimos seis años. Al final de 2011 se lanzó una nueva entrega de fondos para hacer 750 obras más y están aprobados y a la espera de activar el financiamiento de 1.300 obras que corresponde a inversiones en infraestructura de pequeños y medianos productores ganaderos y lecheros para que dispongan de fuentes de agua.
A ello se suma un conjunto de inversiones en tecnología, producción de forrajes y gestión de las unidades de producción para que se tomen medidas tempranas ante situaciones eventuales de menores precipitaciones en el verano. A través de las redes de información, el Gobierno proporciona al sector agropecuario pronósticos de precipitaciones para que los productores tomen decisiones sobre sus cultivos y ganados.
En 2011 se aprobaron proyectos en este sentido por montos cercanos a los 5 millones de dólares. Para 2012 se destinarán 8 millones de dólares a obras de infraestructura de agua productiva. Adicionalmente, estas cifras se enmarcan en un presupuesto total previsto para el quinquenio que supera los 40 millones de dólares. El presupuesto 2005-2010 en esta área llegó a los 20 millones de dólares.

Diario NORTE: