El sector forestal uruguayo crecerá por encima de 5% anual durante el próximo decenio, al tiempo que existe espacio para la construcción de dos nuevas plantas para la fabricación de pasta de celulosa, lo que rechazan organizaciones ambientalistas.
Las perspectivas de la forestación son muy auspiciosas, debido a la demanda sostenida de los productos y la competitividad que tiene Uruguay en el escenario mundial. El sector crece a tasas anuales de 5%, evolución que se prevé «continuará en el largo plazo debido a proyectos de envergadura que se están desarrollando en el país.
Uruguay tiene un millón de hectáreas plantadas de bosques y hay una cantidad de empresas que están apostando a través de programas de fomento que combinan la producción con otros rubros, como el ganadero. El presidente José Mujica admitió el jueves la posibilidad de instalar una tercera planta de celulosa en el departamento (provincia) de Cerro Largo, a 387 kilómetros al este de Montevideo.
Uruguay tiene en funcionamiento desde noviembre de 2007 una planta de fabricación de celulosa en la ciudad de Fray Bentos, sobre el río Uruguay, propiedad de la finlandesa UPM, ex Botnia, y que produce 1,1 millones de toneladas por año.
