La asistencia financiera del Banco de la República al sector agropecuario es excelente, con una colocación de más de US$ 600 millones, lo que significa haber recuperado un 60% del histórico de colocaciones del banco en el sector de 1990, Fernando Calloia resaltó la baja morosidad del 0,7% del sector agropecuario, lo que refleja una situación de cartera muy sana.
Por otro lado, resaltó que esa cartera está concentrada entre los pequeños y medianos productores.
La mitad de los productores son clientes que tienen créditos de menos de US$ 15.000, que apenas representan el 3% de la cartera total que maneja el banco, lo que significa que el BROU tiene una vocación de desarrollo, dijo.
El presidente del BROU explicó que el crédito agropecuario crece a tasas relativamente altas y que el cambio referido al alto cumplimiento responde a que la nueva dinámica del sector requiere de determinados tipos de financiamientos que son muy distintos a los que se venían observando en el pasado.
“Ahora tenemos grandes inversiones agrícolas que son muy caras y grandes emprendimientos en el sector agropecuario, ganadero y lechero, por decenas de millones de dólares, que eran absolutamente desconocidos en el país.
Esa es la parte novedosa de la actividad agropecuaria y del acompañamiento que hace el banco referido a grandes proyectos en lechería, ganadería y agricultura y por otro lado el surgimiento de nuevos empresarios agropecuarios, principalmente argentinos que llegaron a incorporar tecnologías que aumentan la productividad del sector”, dijo Calloia.
Por su parte, la gerente de la División Crédito Rural del Banco República (BROU), Sylvia Naveiro, destacó que son más de 7.000 los productores que son atendidos por los créditos del BROU, por montos que son variables.
El año pasado solo de créditos nuevos se otorgaron préstamos por una cifra de US$ 740 millones, siendo importante el nuevo marco que dispone el banco donde la capacidad de repago es excelente.
Dijo que un 98% es la cantidad de productores que demoran menos de 30 días para pagar sus cuotas correspondientes.
El monto principal de esos créditos se dedica a labores agrícolas, mientras que el resto se destina a las actividades ganaderas de carne y leche.
