De acuerdo al plan del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), los incentivos para la instalación de dispositivos POS serán de 75% para las localidades entre 500 y 1.000 habitantes, y de 20% para aquellas de más de 5.000. En una primera etapa, se otorgarán a comercios de 24 zonas. En el primer trimestre de este año, unos 3.500 comercios incorporaron terminales de pago electrónico, se totalizaron 52.136 POS en todo el país.
Al comparecer ante la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, el coordinador del Programa de Inclusión Financiera del MEF, Martín Vallcorba, reconoció: “Hoy, las pequeñas localidades tienen dificultades para pagar una factura. En muchas no hay donde hacerlo”.
Un relevamiento conjunto con la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP) y el Observatorio de Inclusión Financiera de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de la República identificó los inconvenientes de acceso a los puntos de extracción de efectivo y pago de servicios. Esto derivó en el diseño de un plan que será lanzado próximamente junto a la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) y que, en una primera etapa, atenderá la situación en 24 localidades de las 86 con más de 500 habitantes que fueron relevadas.
“En estas ochenta y seis localidades se desplegará una serie de incentivos y subsidios para permitir la instalación de corresponsales financieros”, informó Vallcorba. En el plazo de un año, la mayoría de esta zonas contará con al menos un punto de extracción de efectivo, según estimó. Con respecto a las localidades con menos de 500 habitantes, recordó que ese tramo “es más complejo de abarcar y sigue estando en la agenda”.
La franja de subsidios otorgados se ubica en 75% para las localidades entre 500 y 1.000 habitantes, y en 20% para aquellas de más de 5.000. “Se ha diseñado una política pública que apunta a atender esa necesidades, a facilitar y a subsidiar para que las localidades más pequeñas no sean zonas excluidas al acceso de estos servicios”, destacó.
La utilización de POS (puntos de venta, por su sigla en inglés) por parte de los comercios creció significativamente desde el año 2011 cuando, en todo el país, había 13.000 terminales. En la actualidad, hay 52.136. En los primeros tres meses de 2017, unos 3.500 comercios incorporaron el sistema. Más de los 80% son pequeñas empresas. Vallcorba sostuvo que estas cifras significan “una aceleración del ritmo de crecimiento y de incorporación de comercios al uso de los medios de pago electrónicos”.
ARANCELES MÁXIMOS PARA COMERCIOS POR USO DE
TARJETAS DE DÉBITO SERÁN DE 1,5% A FIN DE AÑO
Las tasas que los comerciantes de pequeñas escala deben pagar a los emisores de tarjetas de débito se reducirán de 2% a 1,5% a fines de este año. Uruguay se regirá así con porcentajes similares a los establecidos por Argentina y Chile, países con aranceles más bajos en este rubro en América Latina, según informó el coordinador del programa de Inclusión Financiera, Martín Vallcorba, en la Comisión de Hacienda de Diputados.
Desde fines de 2011 y comienzos de 2012 se registró una significativa reducción de los aranceles que pagan los comercios, principalmente los de menor escala, a las empresas emisoras de tarjetas. Tanto en débito como en crédito, el tope máximo era de 7% en 2011. En la actualidad, la tasa es de 2,2% en débito, para las empresas más grandes, y de 2% para las más pequeñas.
En el caso de las tarjetas de crédito, el arancel máximo es de 4% en el rubro alimentación y de 4,5% en general. Vallcorba destacó que, a pesar del aumento registrado en el uso de los medios electrónicos de pago, los comerciantes pagan menos ahora que antes.
Según detalló, sobre fines de este año, los topes máximos de los aranceles se ubicarán en 1,5% para las tarjetas de débito, lo cual representa una diferencia de entre 0,5 y 0,7%, dependiendo del tamaño del comercio. Esta decisión fue establecida a través de un cronograma en los compromisos asumidos por los emisores.
Con esta reducción, Uruguay igualará los niveles más bajos de la región junto a Argentina y Chile. “Los aranceles en débitos están absolutamente alineados con los del contexto regional. Sin duda se puede mejorar, y las iniciativas legislativas en discusión ayudan. Todo esto permite llegar a resultados que mejoran las condiciones de acceso también de los comercios”, sostuvo Vallcorba.