El domingo 4 de setiembre marcó un momento distinto en la campaña política parlamentarista en la ciudad de Rivera. Pese al tiempo que amenazaba descargar una fuerte tormenta, una multitud enfervorizada colmó la antigua calle Cuaró en un franco apoyo a las candidaturas de Tabaré Viera Duarte al Parlamento y del Dr. Marne Osorio a la jefatura del próximo Gobierno Departamental.
El acto organizado en la Zona Oeste de la ciudad de Rivera, en el Barrio Rivera Chico, sobre la avenida 1825 frente al Club Social y Deportivo Frontera Rivera Chico, se extendió por más de tres cuadras repletas de adherentes a la causa impulsada por el ex Intendente Tabaré Viera Duarte, actual candidato a la diputación por la lista 2000 de Propuesta Batllista (PROBA), del Partido Colorado.
Más de 3 mil personas, sin los cálculos más pesimistas, escucharon lo que bien puede denominarse una rendición de cuentas ciudadana de más de 9 años de gestión municipalista, en la que Tabaré Viera y su equipo de gobierno elevaron a límites inmejorables la calidad de vida de los ciudadanos.
Los disertantes en la tarde noche del domingo, fueron el contador Richard Sander, el actual Intendente Vilibaldo Rodríguez y el candidato a jefe de gobierno departamental en los comicios de mayo de 2010, Marne Osorio, quien actualmente ejerce la Dirección General de Higiene, Salubridad y Medio Ambiente de la comuna fronteriza.
Finalmente cerrando la parte oratorio, dirigió la palabra Tabaré Viera quien exhortó a desplegar con fuerza las banderas de la renovación batllista, del cambio y la búsqueda eficiente y honesta del bienestar de todos los ciudadanos, y muy especialmente los más débiles y desprotegidos.
Y como es habitual en este tipo de manifestaciones, la fiesta cívica terminó al ritmo alegre del grupo musical de Miriam Britos.
Más allá de los planteamientos de claro corte municipal, ineludibles para el caudillo riverense, Tabaré Viera no dejó pasar por alto lo que denominó “cultura de partido” y “cultura de fracción”, explicando que ambos conceptos constituyen hechos con antecedentes en todos los espacios políticos de Uruguay, por lo que construir un ámbito sectorial no debe ser considerado una actitud divisionista, sino por el contrario, debe entenderse como un proceso articulador de voces con un núcleo común.
“La historia moderna muestra que la cohabitación de partidos políticos fuertes es un fenómeno que ocurre en forma dinámica y no sólo en relación a las elecciones, al Estado, sino en relación a los partidos en sí mismos como instrumentos de motivación para hacer posibles las mejoras sociales que se requieren”, destacó el ex jefe de Gobierno.
Quizá por esa trayectoria bien definida de los partidos políticos como instrumentos de elaboración de políticas de Estado, es que la esencia de éstos se inscriba más allá de las meras coaliciones coyunturales, constituyéndose en partidos fuertes y con identidades propias que cuentan hasta con elementos de pertenencia que los identifican como tales.
Es así que lo políticamente correcto ha dado paso en Uruguay a la “cultura de fracción” enfatizó Viera, expresando que “este ha sido el ámbito más propicio para la celebración de acuerdos basados en una inequívoca disciplina partidaria, que ha permitido la actuación de grupo de los miembros de una fracción, lo que ha habilitado la constitución de una actitud y una posición partidaria”.
“El 25 vamos a votar en todo el país mejor que en las internas, porque la gente reclamaba -votar a Pedro- y ahora sí pueden hacerlo, pero tengan por seguro que lo harán con el mejor equipo de gobierno, el más solvente en la práctica del ejercicio gubernamental, pero el más identificado con la cultura batllista que fue y aún hoy lo es, la garantía para lo posible, y la certeza que solo ofrece el camino seguro”, dijo Viera.
