A la hora 19:30 de la noche de ayer, miércoles, se reunió la Junta Departamental de Rivera en la Sala de Sesiones “José G. Artigas”. Como primer punto del Orden del Día se realizó la Media Hora Previa de los ediles José Ramón Montejo (PC), Nelson Rodríguez (FA), Ramón Román Taroco (PN) y José María Antuña (PC).
El edil José Ramón Montejo (PC) expresó que “hemos sufrido en los últimos años el cierre de industrias lácteas y el abandono de muchos tamberos. Hay una tremenda crisis del sector lácteo, de la cual no se salva ni Conaprole, que hace 30 años encabezaba toda la exportación uruguaya. Empujaron a esta crisis dos factores principales: primero, el deterioro de las exportaciones lácteas por la pérdida de mercados de una política exterior que en lugar de buscar acuerdos de comercio, los ha esquivado. Segundo, los altos costos internos, incompatibles con los precios del mercado mundial. Pero ahora tenemos otro factor interno del sector: la conflictividad desatada por exigencias sindicales. Si fuera en épocas de abundancia y crecimiento, sería saludable y legítima la lucha de los trabajadores por mejorar su salario y sus condiciones de trabajo. Sin embargo, en una dinámica crítica, de brutal caída, hay sindicatos que se exceden, que no favorecen a los trabajadores, están como el gobierno, poniendo palos en la rueda de una industria que tambalea en frágil equilibrio, y empujan al cierre de más empresas y al abandono de más tamberos. Ni desde el concepto de la división de clases se entiende esto, porque nuestra lechería aunque tiene tambos grandes, en su gran mayoría son pequeños y medianos productores, dependientes de sus propios brazos, en una actividad que simboliza y reúne reforma agraria, trabajo sacrificado, tecnificación, progreso y afincamiento familiar a la tierra”.
El suplente de edil Nelson Rodríguez (FA) expresó: “Recordemos juntos, lo que fue este país antes del 2005, ya que es muy bueno y necesario no perder la memoria. Lo más destacado, desde mucho antes del 2000, por su gran significado solidario, fueron la gran cantidad de ollas populares que prácticamente tenían casi todos los barrios del país, los vecinos solidarios se juntaban en todos los rincones de la capital y el interior, y por medio de colectas y donaciones, conseguían realizar al menos una comida diaria para poder, darle un plato de alimento a los vecinos más necesitados. En nuestro departamento, nos juntábamos teniendo como centro algún club social, una capilla o simplemente en el galponcito de algún vecino, se hacían merenderos, para darles a muchos niños la oportunidad de que metieran algo en la pancita antes de irse a dormir. En otros lugares muy poco desarrollados, lejos de todo, extremadamente pobres, en los cuales no había condiciones de nada, jamás olvidemos Las Láminas, en el departamento de Artigas, vimos dolorosamente como madres en el extremo de la desesperación hervían pasto para darles de comer a sus niños, y no muriesen por desnutrición. No nos olvidamos tampoco cuando en nuestra plaza Artigas, asistimos como los funcionarios municipales realizaban ollas populares, porque tenían atraso de meses en el pago de salarios, llegando al extremo, de que la Intendencia mandara una persona ir a la capital a mendigar dinero para poder pagar sueldos”.
La suplente de edil Soledad Tavares (FA) recordó que el pasado domingo 19 de agosto se celebró el Día de la Trabajadora Doméstica. “Para muchas trabajadoras domésticas, un domingo diferente, ya que se cumplieron 10 años del primer convenio colectivo alcanzado por este sector, lo que posibilitó a las trabajadoras acceder a beneficios y derechos, como la reducción de la jornada laboral, el reconocimiento de horas extra el acceso a un seguro por accidentes y la formalidad laboral para acceder a la jubilación. El sector doméstico representa el 13% del trabajo de las mujeres en el país, cifra que tiende a la baja por el aumento de su participación en otros sectores. A 10 años de su primer convenio colectivo, este sector incrementó su salario mínimo de 7.137 pesos a 15.445. Nos complace saludar muy respetuosamente a un grupo de personas olvidado por mucho tiempo y recordar que en el engranaje social todas las personas son importantes”.
El edil José María Antuña (PC) expresó que “el Polo de Desarrollo Agropecuario, ubicado en el ex-abasto, es un proyecto que está en andamiento y pertenece a la Dirección General de Desarrollo y Medio Ambiente de la Intendencia Departamental de Rivera, impulsado por la Unidad de Desarrollo, gestionado y ejecutado por la División de Desarrollo Rural. Desde setiembre de 2017 se viene realizando dicho proyecto, y en el cual se construyeron tres invernáculos, de los cuales dos estaban destinados al sector hortícola, y el otro para la producción de platines en bandejas con la finalidad de abastecer los dos invernáculos hortícolas, cultivos de chacra y monte de especies nativas frutales. En estas incubadoras se estará realizando actividades de aprendizaje con un grupo de diez personas, quienes actualmente viven en el barrio Bella Vista, personas en estado de vulnerabilidad con rentabilidad de ingresos bajos. Este grupo recibirá un kit de herramientas para realizar las tareas de aprendizaje en los invernáculos, los cuales son brindados por el PDA (Polo Desarrollo Agropecuario). Fueron seleccionadas por asistentes sociales que pertenecen al Programa de Mejoramientos de Barrios, programa perteneciente al Ministerio de Vivienda Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente. Además se estará trabajando en ensayos de cultivos de chacra con jornadas y capacitaciones a los productores interesados en obtener mayores informaciones de la aplicación de conocimientos técnicos en los cultivos”.
El edil Ramón Román Taroco (PN) expresó: “El sábado próximo pasado recorrí el barrio Lagunón, más precisamente el Cerro del Lagunón, que está situado detrás del Cementerio Viejo y es la zona más poblada de ese barrio. Como siempre he dicho y no me canso de repetir, yo no soy un dirigente político y un edil que tenga tapa ojos, miro hacia adelante y también a los costados. Digo esto porque no he tenido empacho ni nunca me tembló la voz para reconocer lo que el gobierno del intendente Marne Osorio hace bien, pero también he reclamado con mucha vehemencia y responsabilidad por aquellas cosas que no se hacen y como que han quedado en el olvido. En la recorrida del sábado puede comprobar que todos los vecinos están conformes con el pavimento que se hizo en todas las calles del Cerro del Lagunón, y más allá de que es una obligación del Gobierno de devolver a la comunidad en obras los impuestos que los mismos pagan, reconocemos que el trabajo quedó muy bien. Por otra parte, tenemos que recordar al Sr. Intendente y a los demás jerarcas que fueron a una reunión con los vecinos del referido barrio, y se comprometieron de hacer que la línea de ómnibus del Lagunón ingresara al Cerro por calles Rondeau, Cecilia Fontana y Solano García, que hasta el día de hoy, no cumplieron con la promesa. Este ingreso del ómnibus estaría facilitando que la gente que usa este servicio no tenga que bajar y subir una pendiente sumamente pronunciada que es la de Capitán Andresito que finaliza en Presidente Giro, donde está la parada del ómnibus. Esta entrada al Cerro, sin dudas que va beneficiar a la empresa, pues va recaudar más, de lo que actualmente recauda, teniendo en cuenta que en el trayecto desde el entronque de Aparicio Saravia y Presidente Giro hasta el Cementerio, un kilómetro aproximadamente, no se levanta pasajeros”.
Luego se pasó a la lectura de los informes de las comisiones asesoras y a los asuntos entrados. A la hora 20:20 minutos finaliza la sesión ordinaria sin más asuntos a tratar.
“El sector doméstico representa el 13% del trabajo de las mujeres en el país”
