Del lugar de los sueños o de la escuela inventada

“Una escuela es más autónoma cuanto más pueda contar su historia, y cuanto más pueda volver a contarla, de acuerdo con los acontecimientos significativos que la marcan, y que exigen nuevos relatos” – Carlos Cullen (2004).

(Por Rosana Antúnez Maciel, Directora) Este sábado pasado se conmemoró el primer año de la escuela Nº 153 de Tiempo Completo. Querida ya antes de nacer, fue esperada ansiosamente por todos los que la observaban construirse paso a paso. Comenzó con 206 niños inscriptos. El 27 de abril de 2012, se realizó el acto de inauguración, contando con gran presencia de vecinos, padres y autoridades departamentales y nacionales. Un día de fiesta para el barrio Mandubí.
Se vistió con túnicas blancas de niños que provenían de todas partes: el 40% de las escuelas vecinas, la Nº 128 y la 137, pero los demás de otras de distintos barrios: La Virgencita, Bisio, La Pedrera, Santa Isabel, entre otros. En ese momento surgió el nombre de su proyecto de convivencia: “De todas partes vienen” El mismo tuvo como cometido fundamental el desarrollo de vínculos interpersonales e intergeneracionales dentro y fuera de las paredes de su hermoso edificio. La escuela abrió sus puertas a padres y vecinos brindando la oportunidad de poder construir una escuela de todos, como institución pública, garantizando la participación y un estilo democrático de gestión. La confianza depositada por la comunidad en el equipo de dirección y en el personal docente y no docente de la escuela fueron la clave del éxito, que hasta hoy, se transparenta en relaciones cordiales, amables, de cooperación, solidaridad, apertura y en un clima armónico para la construcción significativa de saberes.
La propuesta de la escuela basada en el amor a los niños, en el buen trato, en la promoción de relaciones la pro-sociales, constituyeron uno de los pilares en la construcción de un modelo de convivencia que respeta y cuida al Otro.
El vínculo establecido con el medio y el recibimiento de la escuela por otras instituciones de la comunidad promovieron un modo de sentir y actuar que se autoprodujo creativamente. Se ponderó el aprendizaje como formación permanente, científica, para la comprensión y transformación del mundo y de cada uno de los participantes.
Se alentaron propuestas como Trilogías Didácticas, Huerta Comunitaria y el uso socializado de sus amplios espacios para el trabajo con las familias. Se trabajó con el apoyo y en coordinación con SOCAT, Club del Niño, CECAP, Centro MEC, Instituto de Formación Docente, CETI, Brigada de Caballería Nº 1, Escuelas vecinas, otras rurales, de otros centros poblados, públicas y no públicas. Fue la primera en el departamento en contar con fibra óptica en todos sus espacios, gracias a VCR. Rivera, en síntesis trabajando con las puertas abiertas.
La gente del barrio dio probadas muestras de inteligencia participando en comisiones, talleres, reuniones haciendo propuestas, integrándose a los equipos de trabajo. Dando paso a las ideas, a los sentimientos para contribuir en la invención de la escuela.
Inventarse es invitarse a soñar, crear, partir de la imaginación, investirse de deseos.
Descubrirse deseos, invitarse al compromiso, es creer en la educación como valor inestimable para el desarrollo del ser humano, es permitirse ser.
El desarrollo de una cultura de integración para la convivencia desde la escuela no podría sino estar de la mano con las familias. Las mismas comprendieron rápidamente la importancia de su existencia coparticipando con el grupo de educadores. Los modos de vincularse los adultos son modelos de socialización para los niños.
Los niños viviendo este clima de confianza, se llenaron de entusiasmo, participando en innumerables actividades deportivas, clases abiertas, presentaciones de danzas, viajes y concurriendo con asiduidad, por lo cual muchísimos de ellos fueron reconocidos con medallas “Cero Falta”. Comenzaron así a desarrollar lo que se denomina “fidelidad institucional”, que no es otra cosa que el amor por la escuela. La cuidaron y la valoraron porque la sintieron suya, apropiación fundamental cuando queremos fomentar actitudes de respeto hacia los centros educativos, previniendo nada menos que la desvinculación del sistema educativo en la Enseñanza Media.
Felicitaciones comunidad educativa. Por muchos años más de sueños.
Rosana Antúnez Maciel, Directora 2012.

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