ANEP y OSE trabajan para que el agua potable llegue a todas las escuelas rurales

El año próximo el agua potable llegará a 312 escuelas rurales. Desde marzo, doce centros cuentan con ese beneficio. Pasar de utilizar bombas manuales o aljibes a esa instancia, es producto de la coordinación de los vecinos, ANEP y OSE. Con estas acciones se aborda a un 2% de la población. En zonas rurales hay 1.150 locales escolares, centros de reuniones donde se gestionan proyectos productivos que dignifican la vida en el campo.
El trabajo coordinado entre la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) y Obras Sanitarias del Estado (OSE) permitió que los vecinos reunidos en la escuela como centro referente, reivindicaran el derecho de contar con agua potable. El tiempo de espera de llegada del agua depende de la organización de los vecinos, no obstante la situación se efectiviza entre tres o cuatro meses.
El Consejero de Educación Primaria, Oscar Gómez, destacó que el organismo estuvo trabajando intensamente con el Presidente de OSE, Martín Ponce y funcionarios del Ente. El objetivo fue detectar las prioridades dentro de las necesidades que existen. En ese sentido, el año pasado se inauguraron más de una docena de sistemas de agua potable en escuelas.
Gómez afirmó que esas inauguraciones se realizaron en lugares tan distantes como Puntas de la Mina en Cerro Largo o en Costa de Rosario en Colonia.
De esta forma, en marzo se trabajó en fase de ejecución en 12 escuelas rurales. Dos de ellas, están ubicadas en el departamento de Artigas; dos en Paysandú, una en Tacuarembó, tres en Cerro Largo, dos en Treinta y Tres, una en Durazno, y otra en Canelones.
OSE obtuvo un préstamo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para cubrir la totalidad de los costos operativos y realizar las perforaciones.
El Consejero indicó que la esuela actúa como un centro comunitario de referencia en el medio rural y es la red del Estado más extendida en el territorio nacional. Señaló que existen 1.150 locales en el área rural distribuidos en todo el país y más de 1.000 instituciones en zonas urbanas.
En la escuela los vecinos se reúnen para coordinar acciones por el agua potable. También se reúnen en el marco de los centros agropecuarios departamentales que promueven el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca. Asimismo se dialoga sobre la gestión de proyectos productivos una vez que existen posibilidades de contar con agua potable y para actividades de riego.
El tiempo de gestión de los vecinos ante OSE y ANEP oscila entre tres o cuatro meses, dependiendo también de la cantidad de vecinos agrupados. Recordó haber estado el año pasado en “Las Pajas”, “Rincón de la Aldea”, “Pueblo Laura” y en “Sauce de Batoví” en Tacuarembó, cuando se realizaron las primeras habilitaciones en agosto y en diciembre. Esas instancias demostraron un gran esfuerzo coordinado por parte de la gente. Gómez señaló que los vecinos de la zona aportaron mano de obra voluntaria para realizar las colocaciones y las extensiones de las redes.
Expresó que el cronograma pautado se inició en julio de 2009 y en agosto cuatro escuelas tenían el servicio de agua potable habilitado. En el verano del año pasado, el departamento de Educación Rural de ANEP efectuó un relevamiento que permitió el acopio y el manejo de información que aceleró las acciones. En ese contexto, en menos de cuatro meses se desencadenaron las acciones pertinentes para que se concretara la llegada del agua potable a la institución educativa y sus zonas aledañas.
Antiguamente las escuelas tenían un depósito de aguas pluviales conocido como aljibe. En ese sentido, se recolecta el agua pluvial a través de los techos y cañerías que iban a un depósito de agua dulce. A partir de allí, había dos o tres maneras de utilizar el agua: sacar el agua en baldes con una rondana; a través de bombas de tracción manual; o mediante bombas eléctricas o gasoleras.
Gómez explicó que con este sistema no siempre se garantiza la mayor potabilidad, más allá de que siempre hubo recomendaciones por parte de Educación Primaria de que se le agregase líquido Carrel o cualquier elemento que permitiese el combate de las bacterias.
Actualmente poseer el agua potable fiscalizada por OSE con dosificación de cloro en forma permanente, es un cambio sustantivo.
Otro de los mecanismos que las escuelas tenían para el agua era la energía eólica a través de la utilización de molinos. No obstante, muchas veces producto de la forestación de las napas friáticas, las corrientes de agua subterránea se agotaron y los pozos quedaron sin agua. Actualmente, OSE realiza perforaciones entre 45 y 50 metros. El agua que estaba a 10 o 12 metros ya no existe como tal por los cambios provocados por la flora diferente, siendo el eucalipto uno de los causantes de esos cambios.

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