Fue un partido atípico y quedó claro que en todo equipo hay titulares y hay suplentes. Por un lado Peñarol que optó por darle la posibilidad a quienes generalmente no la tienen.
Modestamente estimamos que lo mejor sería probar a los mejores en un partido oficial porque era la gran oportunidad para entrenar con un equipo competitivo aún a riesgo de entender que se jugaba la posibilidad de lesiones, tarjetas y otras situaciones.
Enfrente un equipo con muchos problemas, sin posibilidad alguna, con jugadores importantes suspendidos y con otros que no viajaron desde Montevideo porque ya no había chances.
Otros que no lograron libre en sus trabajos personales y terminaron logrando la presencia únicamente de once jugadores, sin suplentes, con una cancha grande a correr y casi sin entrenamiento.
De todas maneras los rojos de la octava sección fueron netamente superiores desde el comienzo mismo del partido.
Hubo dominio territorial y hubo caudal ofensivo suficiente como para justificar que a los veinte minutos se llegara a un gol que fue anulado cuando un jugador, sin conocimiento reglamentario alguno tocó un balón que estaba a punto de transponer la línea de gol.
Pero Atalaya no se quedó, un par de minutos más tarde logró el tanto válido luego de una buena jugada.
Antes de la finalización de la primera parte, otra excelente jugada de ataque de Atalaya y nuevo gol, en ambas oportunidades fue de Mateos Herrera constituido en uno de los mejores jugadores de la cancha y no solo por los goles conquistados.
Para el complemento Peñarol cambio y el ingreso de Marcio Nogueira no solo fue importante por lo que significa el jugador en el medio sino que hubo modificaciones dentro del campo lo que permitió que Peñarol cambiara tácticamente.
A los cinco minutos una mano que pega en la mano de un rojo en el área y el árbitro entiende que hubo intencionalidad otorgando un tiro penal que Olivera cambia por gol.
Ya era diferente. Dos a uno y Atalaya que comienza a cansarse.
Para colmo, a los 28 minutos es expulsado Mateo Herrera y todo era muy complicado para el rojo.
Los minutos finales fueron aurinegros y mucho más por la superioridad numérica que por el buen juego ofensivo.
En ese momento comenzó a sobresalir el golero de Atalaya que se quedó con todos los intentos de los aurinegros.
Hasta que en los minutos finales se lesionó y ya no fue lo mismo, Peñarol siguió insistiendo y el árbitro dispuso que se jugaran cinco minutos más allá de los cuarenta y cinco que ya se habian consumido.
En ese período un remate de larga distancia, el golero que no la retuvo y en el rebote Marcio Nogueira empató el partido.
Sin mucho más que eso y sin que el técnico de Peñarol lograra extraer muchas conclusiones positivas, se terminó la serie con Peñarol clasificado en segundo lugar y la semana que viene todo será diferente.
LOS DETALLES
PEÑAROL 2 ATALAYA 2
Cancha: Estadio Municipal “Atilio Paiva Olivera”. Hora de comienzo: 15:00. Jueces: Richard Hunderwat, Claudio Salmentón y Pascual Bonfrisco (terna de Paso de los Toros).
PEÑAROL (Rivera): Anderson Etchenique, Leonardo Morales, Gonzalo Picanzo, Giovani Muñoz, Marco A. Gómez, Enrique Coitiño, Franco Emiliano da Silva, Anthony Antúnez, Luis Antonio Pérez, Carlos Alberto Olivera y Darwin Enrique. D.T.: Donato Lemos.
Cambios: A los 45’ Marcio Nogueira por Leonardo Morales. En el segundo tiempo, a los 15’ Pitter del Pino por Enrique Coitiño, a los 16’ Marcos Ramos por Marco A. Gómez.
Goles: A los 5’ Carlos Olivera, de penal, y a los 49’ Marcio Nogueira. Ambos en el segundo tiempo.
ATALAYA (Vichadero): Tommy Suárez, Gabriel Delgado, Marcelo da Silva, Emilio Nazario, Fredy Cor, Adilio Zenón, Marcos Andrade, Rusbel Rodríguez Braulio Cardozo, Mateo Herrera y Leonardo Alvez. D.T.: Álvaro Gustavo González.
Goles: Mateo Herrera a los 35’ y 44’ del primer tiempo.
Observaciones: Fue expulsado Mateo Herrera a los 26’ del segundo tiempo.
