El conflicto entre la Asociación de Árbitros y la Liga Departamental de Fútbol de Rivera no es una competencia donde una deba, necesariamente, ganar y el otro será el perdedor.
Aquí lo que todos debemos tener en cuenta es el fútbol riverense, ese fútbol que tiene cien años y que está por encima de dirigentes, jugadores, o árbitros.
Cien años donde hubo algunos otros inconvenientes similares a este y se solucionaron con diálogo.
Hay que tener un poco de memoria para recordar que hace ya un par de años jugamos un campeonato Rivera integro con el arbitraje de tres tacuaremboenses que vinieron todas las semanas y se llevaron todo el dinero del certamen.
No olvidemos que no hace mucho tiempo las finales del campeonato Rivera se jugaron con árbitros de Paso de los Toros y Durazno.
El fútbol no debe parar y eso no es porque se le deba ganar a los árbitros sino porque el fútbol es una cosa y los conflictos personales que puedan existir, son otra muy diferente.
Las soluciones están al alcance de la mano pero sin exigencias ni de un lado ni del otro.
Con concesiones de ambas partes para que no exista el rótulo de ganador o perdedor.
Si la dirigencia debe volver a analizar el tema de la sanción impuesta por OFI y rehabilitar a los árbitros a nivel de la Organización del Fútbol del Interior, bienvenida sea, pero también es importante que los árbitros reconozcan sus errores y acaten las disposiciones disciplinarias de nuestro Tribunal de Penas.
Por lo demás, es necesario entender que se trata de un problema económico y, ahí si, los únicos que pierden son los árbitros que se ven limitados en sus ingresos y eso es real.
Que no me vengan con el cuento que se trata de unos pocos pesos que no hacen al presupuesto familiar porque ¡es mentira!, es un muy buen dinero que los árbitros llevan a su familia haciendo algo que les agrada mucho.
Hoy un grupo de jueces se está llevando ese dinero y se trata de verdaderos árbitros responsables que están salvando al fútbol glorioso de Rivera, por lo demás esperamos, con ansiedad, la solución al problema.
UN CONFLICTO DONDE MUCHOS PIENSAN EN GANAR Y
POCOS PIENSAN EN LA HISTORIA DE NUESTRO FÚTBOL
Ya van varias semanas y nos habíamos propuesto no escribir acerca del tema de actualidad pero ha llegado el momento de brindar nuestra opinión al respecto.
Creemos firmemente que tenemos autoridad para hacerlo hasta por el hecho de ser uno de los comunicadores de mayor antigüedad en el ámbito del deporte.
Comenzamos a trabajar en esto del fútbol el día que la celeste mayor lograba el título del interior en la recordada final ante Florida en el 68.
Acompañamos a la selección, a los clubes, a los dirigentes desde siempre y estuvimos codo a codo con los árbitros en el momento del gran problema que terminó con la lamentable contratación de árbitros tacuaremboenses para actuar en todo el Campeonato Rivera.
Esa actitud nos permitió recibir el premio de ser considerado como socio honorario de la Asociación de Árbitros de Rivera, lo que estos nuevos funcionarios arbitrales ni siquiera tienen conocimiento porque seguramente nunca leyeron las actas del pasado. Estuve al lado de grandes como Emilson, Eduardo, Reducindo, Suterno, Ferrando, Alvez, Porciúncula, Amarante Silva, Shesler Galo, Cabrera, Nery, Calcagno, Machado, Lucas. Braga, Casañol, Figueroa, y tanto otros y hasta recuerdo que en una oportunidad designamos a Pedro Suárez como el mejor árbitro de la temporada (cosa que algunos desconocen hoy).
Por si fuera poco, un día y luego de una discusión con un árbitro (discusión reglamentaria), resolví hacer el Curso de Instructor solamente por el mero hecho de conocer a fondo el reglamento.
No quise ni siquiera rendir examen para que no pensaran que deseaba ser docente de árbitros cuando en el medio había buenos y capacitados Instructores.
Luego, hace un par de años volví a realizar el Curso pero ya con intenciones de rendir la prueba y tuvimos la posibilidad de haberla realizado en nuestra ciudad junto al Director del curso, Juan José Fortunato.
Aquí estuvieron más de quince aspirantes que recibimos el título en la sala de sesiones del Estadio Municipal.
Pero seguía con la firme idea de no ejercer la profesión para la cual me había perfeccionado.
Hasta llegue a reconocer que Luis Casañol era el mejor de esta zona del país en momentos que estábamos distanciados y ni siquiera nos dirigíamos la palabra, pero tuvo la grandeza de designarme Veedor en algunos de los encuentros del Campeonato Nacional cuando integraba el Consejo Técnico de OFI.
Hoy, lamentablemente, debo decir, con claridad, que los árbitros no tienen razón, que deberían acatar ls disposiciones establecidas y volver a la función.
Recordemos que todo esto comenzó por un problema generado, según ellos, por falta de seguridad en los partidos.
Cuando solicitaron entrevista con la dirigencia, en ese mismo momento los dirigentes estaban reunidos con el Jefe de Policía para analizar el tema.
Hoy, cuando ya pasaron varios días y las soluciones no llegan, en cada una de las reuniones mantenidas ya ni se habla más de la seguridad y solamente plantean temas referidos a las sanciones que, sin duda alguna deberán cumplir.
Es necesario entender que los órganos jurisdiccionales están para que se cumpla con sus disposiciones y además se trata de un órgano independiente al que no se le puede solicitar que no pene a un autor de una pena.
La infracción se cometió y es necesario que exista una pena porque de lo contrario habilita a un delegado de club a solicitar la exención de la pena que le pueda caber a un jugador que agredió a un árbitro.
Pero además, guste o no, y a pesar que nadie habla respecto al tema, esto es también económico.
A los árbitros les está faltando un par de miles de pesos por mes y, les guste o no, este tema está por encima de orgullos personales.
Detrás de cada uno de ellos hay una familia que espera, que hoy se priva de algo y que no deben pagar las consecuencias de una medida apresurada y mal tomada como pueden haber muchas en todos los ámbitos de la vida misma.
Reconocer el error, buscar un acercamiento en relación al tema de la OFI para que puedan quedar habilitados para actuar pero acatar la pena que se les imponga a nivel del Tribunal de Penas de nuestra Liga porque, cometieron una infracción.
Por lo demás y junto al agradecimiento a quienes vienen actuando porque ellos si salvaron al fútbol riverense que tiene cien años de gloria, esperamos ansiosamente que haya un entendimiento colectivo con la Asociación porque de lo contrario, seguramente en pocos días más comenzarán a volver uno a uno todos los árbitros y en ese caso la situación de algunos puede ser diferente.