Coincidencia o no lo que importa es que los nuevos neutrales asumen en momentos que se dio a conocer el informe de la actuación de la selección juveniles sub 18.
De la lectura del referido informe elevado por Carlos Wallace se pueden extraer interesantes conclusiones que deberán leer atentamente los dirigentes.
En cuanto a la asunción de los nuevos neutrales estos llegan con muchas ganas de cambiar una triste imagen que tiene en este momento nuestro fútbol riverense a nivel nacional.
Gente de fútbol acostumbrada a otras épocas y con ganas de trabajar, y eso es muy importante.
Llegan a la Liga con el apoyo de todos los clubes del medio.
Como no había sucedido en otras oportunidades, fueron los nueve clubes a votar y Eduardo Guadalupe cuenta con el apoyo de todos y todos están dispuestos a colaborar para revertir esta difícil situación.
Guadalupe ha dicho que sabe escuchar, que tiene marcha atrás y que reconoce cuando se equivoca.
En esta oportunidad es importante que Guadalupe también sepa leer.
El informe de Carlos Wallace con relación a la actuación de la última selección sub 18 abre los ojos a un sin número de situaciones.
El director técnico hace un análisis muy claro con relación a lo actuado pero, mucho más que eso, hay conclusiones muy interesantes, sugerencias que deberíamos leer con atención, críticas a los dirigentes, a los clubes, al sistema.
En definitiva se trata de un buen material de lectura para comenzar a entender en que momento se encuentra nuestro fútbol.
A partir de allí, de su lectura, de su comprensión, de entender lo que dice, puede ser el cimiento del trabajo de los nuevos dirigentes.
Pero ellos son los responsables de llevar adelante la tarea de encauzar un deporte muy venido a menos que hace años que no logra un título y los balances deportivos se realizan en función de los campeonatos obtenidos, pero también nosotros somos tan responsables como ellos.
Cada uno en su función, los dirigentes dirigen, los técnicos deben hacer jugar bien a sus equipos, los jugadores deben mejorar su rendimiento en la cancha, los árbitros perfeccionarse y el periodismo deportivo colaborar en la medida que se entienda que la crítica nunca es destructiva porque nadie querrá que la celeste permanezca en el ostracismo actual.
