Luego de la resolución de las semifinales, esta noche se habrá de reunir el Consejo de Primera División con la finalidad de fijar los detalles de las finales del Campeonato Rivera.
En el preliminar el equipo de Bola Ocho supo manejar con muchos cuidados, la ventaja con la que llegaba a esta última instancia previa al final del certamen.
No olvidemos que fue el decano el que llegó a esta instancia con la ventaja deportiva, lo que determinaba que, con una victoria simple, clasificaba.
Era obvio suponer que el equipo decano se iba a largar al ataque desde el pitazo inicial, y así fue. Los remates de tiro libre y de media y corta distancia de João Fernando Pintos Santana pasaron a ser de fundamental importancia, lo mismo que los desbordes de Robson Guzmao.
Incluso, en los primeros cuarenta y cinco minutos hubo varios intentos por ese medio y en todos los casos hubo muy buenas intervenciones de Fernando de Mello, que advirtió con claridad que de su mejor rendimiento pasaba la chance de Bola Ocho.
Pero Bola Ocho no fue solamente un equipo que se defendió porque incluso en toda oportunidad que tuvo, largó a sus mejores jugadores al ataque, y muy bien secundados por una férrea defensa y un mediocampo que fue de vital trascendencia para el logro final.
Cuando comenzaba el segundo tiempo y con el albinegro con un jugador menos en la cancha por la expulsión de Víctor Ferreira cuando promediaba la primera parte, todo comenzó a facilitarse para Bola Ocho.
Tenía un jugador más en la cancha y supo utilizar el espacio vacío que quedaba y, además, un penal a favor, transformado en gol, le dio la tranquilidad que necesitaba para llegar con relativa tranquilidad al final del partido porque cada vez era más complicado para el decano.
El nerviosismo que se advertía en la cancha, la exigencia de la tribuna y el reloj pasaron a ser los enemigos más importantes del conjunto de Lavalleja que, por otra parte, no acertó en la integración del equipo y mucho menos en los cambios. Necesitaba goles y se privó de su centrodelantero y de su mejor jugador de creación.
No extrañó para nada que el nerviosismo que se advertía en la cancha fuera determinante de un final que se esperaba debido a lo que se veía. Jugadores expulsados, nerviosismo total en el decano y la tranquilidad en Bola Ocho que llegó a concretar dos goles más para evitar cualquier situación anormal que pudiera suceder en el final.
En el partido de fondo no hubo sorpresa alguna y por aquello de la lógica del fútbol, Peñarol se aseguró la clasificación.
Llegaban al encuentro con la ventaja deportiva, pero además con un cimiento de dos goles a favor, lo que determinaba que la tarea de los rojos fuera muy complicada porque determinaba que para llegar a la final debía marcar tres goles.
A Peñarol le habían marcado tres goles en todo el campeonato y los rojos tenían noventa minutos para hacerle la misma cantidad de goles. Ello demuestra un gran momento de Anderson Etchenique, pero, además, un seguro trabajo de su defensa.
Y, es cierto que Peñarol aún no ha rendido en este campeonato todo lo que puede, pero en este caso su base era tan sólida que era muy difícil que se pudieran mover sus cimientos.
Entonces, el resultado, la clasificación, se ajusta no solo a lo que se vio en la cancha por el oportunismo de los aurinegros en marcar en momentos que los rojos buscaban llegar a concretar al menos un gol para alentar alguna esperanza, sino que además se ajustaba a la lógica del fútbol.
Peñarol era mejor equipo, tenía mejor plantel, llevaba la ventaja deportiva y además dos goles más y entonces la consecuencia no podía ser otra que confirmar la clasificación.
Sin embargo, y dicho con anterioridad, Peñarol aún no ha conformado en la disputa de este campeonato. Siempre hay situaciones que merecen correcciones por parte del técnico, lo que, hasta ahora, ha demostrado que a pesar de las individualidades como del juego de equipo, el aurinegro deberá mejorar, presentar algo distinto a lo poco que mostró hasta ahora pero que le ha permitido salir airoso de situaciones que pudieron ser complicadas.
Las finales necesitan otra cosa y la gran ventaja aurinegra es que tiene jugadores como para pensar en una reacción.
LOS DETALLES
BOLA OCHO 3 LAVALLEJA 0
Cancha: Estadio Municipal “Atilio Paiva Olivera”. Hora de comienzo: 19:30. Árbitros: Silvio G. Antúnez, José Ferreira y Heber Monje. Cuarto árbitro: Richard Vargas.
BOLA OCHO: Fernando de Mello, Alex Carreiro, Diego Tona, Mateo Barboza, Pablo Santos, Vagner Da Silva, Mario Pereira, Luis Dos Santos, Joaquín Nepomuceno, Facio Melo y Joselber Goncálvez.
Cambios: Felipe Araújo por Joaquín Nepomuceno; Luis Alberto Silveira por Vagner da Silva; Mauricio de Vargas por Fabio Melo; Wilson da Cunha por Joselber Goncálvez; Axel Migales por Mario Pereira.
Goles: Diego Tonna -de penal- a los 8’ del segundo tiempo, Fabio Melo a los 39’ del segundo tiempo y Luis Alberto Silveira a los 45’ del segundo tiempo.
LAVALLEJA: Diego Basso, Robinson Seguí, João Santana, Mateo Zaballa, Santiago Saravia, Kevin Zabaleta, Víctor Ferreira, Robson Guzmao, William Etchechury, Franco Fagúndez y John Lenon Martins.
Cambios: Bruno Guedes por John L. Martins; Facundo Serpa por Mateo Zaballa; Guilherme Coitinho por Kevin Zabaleta.
Observaciones: A los 24’ del primer tiempo fue expulsado Víctor Ferreira y a los 44’ del segundo tiempo fue expulsado Santiago Saravia.
PEÑAROL 2 FRONTERA RIVERA CHICO 0
Cancha: Estadio Municipal “Atilio Paiva Olivera”. Hora de comienzo: 21:30. Árbitros: Sandro Ferreira, Yeferson Rosa y Jhones Machado. Cuarto árbitro: Wilmer Rodríguez.
PEÑAROL: Anderson Etchenique, Washington Leites. Fabiano Maciel, Sebastián Rosano, Maximiliano Machado, Juan Gabriel de Mello, Joaquín Sánchez, Fabricio Ferreira, Pablo Munhoz, Pablo Farías y Richard Gómez.
Cambios: Gabriel Madruga por Pablo Farías; Leviston Carballo pro Richard Gómez; Rodrigo Cuña por Pablo Munhoz; Marcos Boldrini por Joaquín Sánchez; Marcos Escobal por Juan G. de Mello.
Goles: Joaquín Sánchez a los 29’ del primer tiempo y Richard Gómez al 1’ del segundo tiempo.
FRONTERA RIVERA CHICO: Gregory Rodríguez, Eric D. Sum, Nicolás Dos Santos, Juan Gabriel Albornoz, Jonathan Montenegro, Marcelo López, Marcio Nogueira, Víctor Hugo Espinoza, Gastón Machado, Andrés Silveira y Eduardo Gómez.
Cambios: Renato Silva por Víctor Hugo Espinoza; Ángel Silveira por Jonathan Montenegro; José G. Pachón por Nicolás dos Santos; Lucas Flores por Andrés Silveira.