Estimamos que la medida llega en el momento justo. Los hechos de violencia que veníamos alertando casi a diario, llegaron a un punto del que difícilmente pudiéramos dar marcha atrás y recomenzar.
El pasado martes, en horas de la tardecita, cuando finalizaban los entrenamientos de los distintos equipos, un grupo de cuatro jugadores de uno de ellos agredió a un chico por el solo hecho de pertenecer a otra institución.
Un hecho que ya se había registrado con anterioridad pero en otros ámbitos aunque el detonante siempre había sido el fútbol.
Un hecho que no pasó inadvertido porque hubo intervención policial luego de la denuncia correspondiente.
Ante ello hubo una rápida movilización con la finalidad de analizar la situación y se citaron a los Presidentes de los clubes para que junto al Presidente de la Liga se comenzaran a instrumentar medidas de cambio radical.
Felizmente fueron la gran mayoría de los Presidentes, nunca antes los habíamos visto tan unidos y eso ya es una buena señal.
De los nueve clubes de primera faltó uno a la reunión y seis estuvieron representados por su máxima autoridad.
Se debatió durante un tiempo prudencial, se presentaron diversas posibles soluciones al inconveniente generado a partir de la violencia hasta que al final se puso a consideración una de las mociones que circulaban en el ambiente futbolístico local, la suspensión de la fecha.
Todos estuvieron de acuerdo y estimamos que fue la medida más acertada cuando se había llegado a ese extremo.
Un domingo sin fútbol, un fin de semana sin saber quienes se clasifican a las finales del certamen y en parte es un momento de reflexión para todos aquellos que suponen que con violencia se puede llegar a algo.
Ahora, y con la paralización de la actividad oficial, es tiempo de pensar en otras soluciones y esta medida sirve como base para que se pueda trabajar en un fútbol riverense diferente donde ganen los que tienen que ganar pero en la cancha en una plena competencia deportiva sana y sin la mancha que puede significar hechos de esta naturaleza.
En definitiva, no hay fútbol este fin de semana y todos nos quedaremos en casa extrañando un domingo sin canchas abiertas y sin competencia que solamente volverá cuando se pueda brindar la seguridad de un “juego limpio”.
