(Por Jorge Fabeiro, Club de Leones de Tranqueras) El día 7 de setiembre falleció Pablo Lauro Tarabal Piñeiro, pocos días después de cumplir sus 90 años de vida. Nació en Tranqueras el 18 de agosto de 1923.
En al año 1956 se casó con Romilda (Chicha) Navarro, su querida e inseparable compañera de cada momento de su vida, con quien tuvo dos hijos: Pablo y María Elena.
Se desempeñó como funcionario del Banco República cumpliendo funciones en la Sucursal Tranqueras. Era Hincha de Club Atlético Tranqueras, y fue jugador del mismo, ocupando el puesto de arquero.
En al año 1963 fue uno de los abnegados y solidarios tranquerenses que decidieron fundar el Club de Leones de Tranqueras, hecho que se realizó oficialmente el 1 de diciembre de ese año.
A partir de entonces, dedicó su vida a lo que más le gustaba hacer: ayudar a los más necesitados. La frase del Escritor José Ortega y Gasset, “Felicidad es la vida dedicada a ocupaciones para las cuales cada hombre tiene singular vocación”, es como “hecha a medida” para Pablo Tarabal. La vocación de Pablo fue siempre servir a la comunidad, a los menos favorecidos, y su felicidad era trabajar incansablemente para lograr estos objetivos, cuyas realizaciones disfrutaba inmensamente.
Se desempeñó como Secretario del Club de Leones durante muchos años, y fue Presidente en tres oportunidades, además de ocupar varios cargos importantes a nivel del Distrito J2.
Fue uno de los principales impulsores de la obra más antigua y permanente de nuestro Club, las Becas, mediante las cuales el Club de Leones de Tranqueras ha apoyado económicamente durante cuatro décadas a estudiantes destacados de escasos recursos. El León Pablo se encargaba, desde los inicios de esta Obra, de recaudar dineros mes a mes, que eran íntegramente volcados a dichas Becas estudiantiles.
Junto a su Dama Romilda (más conocida en Tranqueras como “Chicha”, de profesión Maestra), el León Pablo se encargaba año a año de realizar la Pesquisa Visual en varias Escuelas urbanas y rurales y en el Liceo. Las impecables planillas de pesquisa que elaboraban Pablo y Chicha, donde se registraban los detalles correspondientes, fueron tomadas como ejemplo a nivel Distrital y nacional.
Entre sus tantas y variadas tareas, su presencia y actividad en la Fiesta Criolla era tan infaltable como eficaz, siendo su función principal atender la cantina, además de participar en la organización previa y en trabajos posteriores.
En el año 1990 (hace 23 años), aquejado de una grave enfermedad, fue sometido a una importante cirugía que afectaría algunas rutinas por el resto de su vida, aunque no fue impedimento para que siguiera trabajando con el mismo entusiasmo y eficacia en todas las tareas de su querido Club de Leones.
Hace pocos años recibió la Mención “Amigo de Melvin Jones”, merecida distinción que otorga nuestra Fundación Internacional de Clubes de Leones.
Pablo Tarabal era un hombre de vida sencilla, afable amigo de sus muchísimos amigos, y toda su fortuna era su esposa Chicha, sus dos hijos y sus cuatro nietos.
El León Pablo Tarabal nos deja un enorme legado de ejemplares enseñanzas de servicio solidario, marcando de forma indeleble una profunda huella que indica el camino por el cual deberíamos transitar todos los Leones.
Los Leones de Tranqueras expresamos nuestro dolor en este momento tan triste, a la vez que estamos seguros de que el León Pablo Tarabal será recordado siempre con alegría y gratitud.